Pamela Chica: "mi empoderamiento ha sido un aprendizaje"
Por su amor al diseño, así como al campo, sus días son una dualidad entre el rol de diseñadora de joyas y el de empresaria agrícola.
Pamela Chica lleva la esencia de una mujer multifacética. Por legado, elección y amor se desenvuelve en el rubro agrícola, así como en el de las joyas.
Desde la adolescencia decidió que aquel sería su rumbo. Tan firme fue su voluntad que hoy, a sus 34 años, es una calificada profesional que cursa un MBA con especialidad en Marketing y también es diseñadora vanguardista de joyas.
Con ese bagaje dedica su tiempo a la administración de la empresa familiar, que se encarga de la producción y exportación de banano, cacao, pitahaya y productos; y en lo que resta de horas, trabaja en la elaboración de joyería fina.
Mientras sus días transcurren entre Guayaquil y Naranjal, dialogó con SEMANA sobre las claves del éxito en esa dualidad que a su vez inspira a más mujeres.
Su amor por el campo
Desde muy chica, Pamela supo acompañar a su padre, Ronny Chica, en las tareas de la hacienda. En la adolescencia ya estaba implicada en ese quehacer junto a él. “Íbamos a caballo para revisar todas las áreas”, recuerda.
El fallecimiento de su padre fue un golpe muy duro. Pamela finalizaba la secundaria, y ante el dolor agarró fuerzas para poder asumir más responsabilidades en la empresa junto a su mamá Ligia Mora y su hermano.
Su visión ha ayudado a que las propiedades abastezcan diferentes mercados internacionales (Europa, Estados Unidos, el Cono Sur y Rusia). Ya han estado presentes en ferias internacionales realizadas en Berlín y Madrid, para dar a conocer el abanico de productos orgullosamente ecuatorianos.
“Para mí, las metas alcanzadas son apenas el comienzo de las que se piensa alcanzar”, sostiene. Si bien el sector agrícola es un ámbito en el que predomina la presencia masculina, dice que eso no ha sido impedimento. Al contrario, “el hecho de que vean una mujer ha sido una razón para que se normalice trabajar en equidad, como debe ser”. Y agrega: “Mi empoderamiento ha sido un verdadero aprendizaje”.
Conexión con el diseño
Su talento por las artes plásticas lo ha cultivado desde la niñez. Una vez que finalizó el colegio optó por explayar esa esencia artística siguiendo la carrera de Diseño Vanguardista de Joyas en Eurodiseño. Clases que iban a la par con las de Ingeniería en Ciencias Empresariales en la UEES. “En mi juventud solo pasé estudiando. Incluso, tomé más cursos de joyería en Madrid, Barcelona y Lima”.
Tiempo después el esfuerzo dio resultados. Durante el 2015, Pamela emprendió su marca PCH (iniciales de su nombre) y desde entonces ha recibido gran aceptación. Muestra de ello es que tiene siete años consecutivos resaltando la belleza de candidatas de diferentes certámenes (Reina de Guayaquil, Miss Word, Miss Grand International y Miss Wheelchair) con sus joyas. Asimismo, sus diseños han sido expuestos a nivel internacional, patrocinados por Proecuador.
El trabajo en la hacienda es su fuente de inspiración al momento de bocetear. “Apreciar la belleza de la flora y la fauna que nos rodea, y lograr recrearla de alguna manera en aretes, dijes o pulseras, es la garantía de un complemento único”, asegura.
Para elaborar sus trabajos utiliza varias técnicas, como el alambrismo (hilo laminado en oro). Además, plasma piezas en plata y bañadas en oro. Y fusiona diversos materiales como vidrio, madera, caucho, cuero, acrílico, fibra de banano y otros.
Sin local propio, la mayor parte de las ventas proviene de las redes sociales. Eso ayudó a que PCH se posicione no solo a nivel nacional sino también en el exterior, en pro de que se valorice lo hecho en Ecuador.
Labor social
El ímpetu por la labor altruista es un ejemplo que le impartió su abuela Fanny Cubillús (+). Durante veinticinco años ella fue presidenta de la Corporación Social para la Tercera Edad ‘San Francisco de Asís’, en el cantón Naranjal.
Consciente de la problemática nacional e internacional por la pandemia, Pamela se hizo presente en dicha corporación con planes de ayuda social.