Este paseo busca aliviar el estrés de perros rescatados
Un grupo de voluntarios lleva todos los domingos a los perros al parque.
Siriaca es una perrita de ojos enamoradores. Tiene siete años y las primeras veces que un grupo de voluntarios llegó a la Fundación Amigos con Cola para llevarla de paseo, salía corriendo a esconderse. Después de dos meses de intentos frustrados, finalmente lograron que camine hasta el parque, cuenta entre bromas Cecilia Torres, aunque dice que de vez en cuando “arma pataletas”.
No en vano se ha ganado el apodo de “La diva”. Muchas veces, como no quería avanzar, uno de los voluntarios debía llevarla en su carro, dice Cecilia, quien lidera al grupo encargado de las salidas.
Cada domingo, a las 11:00, jóvenes de todas las edades llegan hasta la fundación para dar a Siriaca y a una decena más de rescatados un momento de cariño y un recorrido que dura un par de horas. Hay estudiantes y profesionales de todas las ramas colaborando.
Xavier Cevallos, fundador y director de esta organización de rescate animal, dice que esa labor para ellos es importante porque permite a los animales eliminar el estrés. De otra forma, no sería posible.
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Siriaca es "la diva". Si no quiere caminar, no hay cómo convencerla.Cortesía -
Tribilín es inquieto. Muchas veces en los paseos sale corriendo.Cortesía -
Apenas Bonita escucha que llegan los voluntarios, alerta con sus ladridos a los demás.Cortesía -
Cuando Vicky sale de paseo, se acerca a los voluntarios para que la acaricien.Cortesía
Para ser parte de esta campaña denominada Pasea a un rescatado, basta con inscribirse al correo voluntariado@amigosconcola.ec. Eso sí, no podrás escoger al perrito que deseas pasear, pues te será asignado según varios aspectos.
A Tribilín, por ejemplo, un niño no podría sacarlo. Hay que ser fuerte, porque, de pronto, le da por salir corriendo. Hay otros, en cambio, a los que hay que convencerlos para regresar a la fundación.
El grupo de voluntariado comenzó en febrero de 2018 con esta campaña. Al inicio había perros que salían como locos, otros que tenían miedo a las calles porque revivían el maltrato.
En el arranque participaron dos voluntarios, pero se han ido sumando, hasta que algunos domingos han ido más de 30. Y muchos hacen más que pasear a los perros, los bañan y ayudan a limpiar el lugar. También participan en eventos para conseguir fondos para ellos.
Y si eres amante de los gatos, también serás bienvenido. Hay decenas allí. Podrás abrazarlos y pasar tiempo con ellos.
