Meditación: Pautas para aplicarla de forma correcta
Si tienes ganas de empezar esta práctica, hay claves esenciales para hacerlo con el pie derecho.
Es usual que en el trabajo, los quehaceres de la casa, los problemas interpersonales se acumulen y se conviertan en una carga en tu cabeza que es muy posible que no te dejen dormir.
Todos esos pensamientos van a mil por hora dentro de ti y crees que callarlos es una batalla perdida, pero es posible que no estés aplicando bien los métodos que conoces.
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Una estrategia bastante subestimada es la meditación. Y para entenderla es necesario comprender que es un estado natural de la mente y que su objetivo es silenciarla, explica Gustavo Plaza, maestro de yoga y meditación, con más de 30 años de experiencia.
Para aplicar la meditación de manera correcta en tu vida, el experto comparte algunas recomendaciones.
Su postura es crucial
Suena como algo irrelevante, pero es una condición muy importante para cumplir con el objetivo de despejar la mente. El posicionarse de forma firme pero cómoda, ya sea en el piso o en una silla con los pies bien asentados y la espalda despegada del espaldar, te da el espacio suficiente para que tu respiración sea completa y no superficial. Ya que al no estar encorvado permite a tu diafragma que se mueva completamente. Adicional a esto también evitas que haya tensiones ocasionadas por el apoyo incorrecto del cuerpo en algunas extremidades.
Relaje su cuerpo y mente
Gustavo cita a varios expertos al decir que a la mente se la puede tomar como un ‘mono loco picado por un alacrán o como la loca de la casa’, porque casi nunca está tranquila. De allí que este paso suele ser complicado, porque las preocupaciones, al igual que las tensiones del cuerpo, pueden ser grandes distractores. Por eso, una vez que esté en una postura adecuada, empiece de a poco a relajar cada extremidad del cuerpo. Tómese el tiempo que necesite y enfóquese en una sola cosa, como por ejemplo mojar sus dedos índice y medio, acercarlos a su nariz y concentrarse en la sensación fría al inhalar y en el calor que genera al exhalar.
¡A meditar!
Hay distintas maneras de hacerlo, pero para comenzar no se necesita de mucho tiempo. Las primeras semanas puede tomarse 5 minutos para meditar y aumentar de 5 en 5 cada dos semanas. Trate de que su mirada y la mente se concentren en una sola cosa. Tal vez en un objeto que tenga al frente, o también es posible optar por los mantras. Estos son muy buenos para mantenerse atentos y concentrados en el aquí y el ahora. Los aconsejados por el experto son los sonidos o palabras: Ave (inhala), María (exhala). También puede aplicar como recurso inhalar el aire durante 3 segundos y exhalarlo por otros 3. Otra opción es contar 10 segundos por cada respiración.
¿Por qué me duermo?
Si una persona se sienta a meditar y se queda dormida, es un síntoma de que tiene mucha carga emocional que la está cansando. En las primeras meditaciones, es muy recomendable dejarse llevar por el sueño, porque este ayuda a eliminar las causas de estrés. Pero si esa persona se sigue durmiendo, quiere decir que no ha hecho ningún cambio en su vida para mejorarla, como dormir las horas suficientes, alimentarse bien, etc.
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