El perejil y sus bondades terapéuticas
No solo sirve para realzar el sabor de sus platos, sino que sus componentes ayudan a combatir algunas afecciones.
Es uno de los condimentos más utilizados en la gastronomía y también se le atribuyen propiedades curativas o medicinales. Es ideal para una buena digestión y ayuda a combatir problemas de gases y retortijones. “Actúa como un excelente diurético natural, aunque su función más importante es ayudar a bajar la presión. Es desintoxicante. Elimina las toxinas, en lo relacionado con la hipertensión, sobre todo cuando hay retención de sodio”, detalla el naturópata Walter Bruque.
El experto aconseja tomar cuatro vasos de infusión de perejil a diario, especialmente en el caso de los hipertensos. Y de preferencia recomienda consultar con un médico.
- Coctel vitamínico
Contiene vitaminas como la K, que ayuda a regular la coagulación sanguínea; la C, necesaria para poder absorber el hierro; y abundante vitamina A, elemento importante para la visión, la piel y el crecimiento de los huesos. Es también fuente de betacaroteno, un antioxidante que ayuda a proteger el cuerpo de los radicales libres responsables del envejecimiento prematuro.
- Diabetes y dolor articular
El consumo regular de este condimento logra disminuir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en un 26 %, gracias a la mirectina, un nutriente natural del perejil. Otro beneficio es que al tener propiedades antiinflamatorias, su uso diario logra aliviar el dolor en las articulaciones.
- Combate la halitosis
Cuando el mal aliento le haga pasar malos momentos es recomendable masticar hojas frescas de perejil con frecuencia (una vez trituradas puede escupirlas o tragarlas). Sus aceites esenciales y alto contenido de clorofila ayudan a refrescar su boca. Es la mejor alternativa si ha comido ajo.
- Tenga en cuenta que
- Aunque consumirlos en las comidas es seguro para la salud, vale recordar que el perejil es rico en oxalatos, principal causa de la generación de piedras en el riñón en personas propensas a producirlos.
- Si está embarazada, no consuma té de perejil.
- Los tipos
Si se fija detenidamente en sus hojas, comprobará que existen dos tipos de perejil: uno con las hojas rizadas y otro con las hojas lisas. El primero es poco aromático y más estético (se lo utiliza como elemento decorativo), mientras que el segundo es de un verde intenso y de sabor concentrado.
