Recompensas y hasta telepatía para recuperar a las mascotas

Bigotes se perdió. La última vez se lo vio en la 20 y Cuenca, en el suburbio de Guayaquil, en el que debía convertirse en su nuevo hogar. Escapó al poco tiempo de haber sido dado en adopción por la fundación Amigos con Cola. Apenas los voluntarios lo supieron, empezaron un operativo de búsqueda. Pegaron afiches en los postes y paredes para pedir ayuda para ubicar al gato, entregaron volantes puerta a puerta y colocaron mensajes en las redes sociales solicitando pistas.

Han intentado de todo. Incluso dialogaron con una comunicadora telepática animal, quien asegura que a través de una fotografía puede contactarse con los animales. “Una psíquica nos ubicó. Como no teníamos más pistas, nos dijo cómo se escapó, qué había hecho y dónde estaba, que parecía que una rescatista lo cogió de la calle”, cuenta la voluntaria Gabriela Alvear.

Como les ocurre a ellos, que esperan hallar a Bigotes, que está perdido desde el 24 de mayo pasado, los dueños de mascotas tratan todas las formas posibles para reencontrarse con ellas.

Hay quienes tienen suerte, como la familia que volvió a ver a Napoleón. “El bull terrier más buscado de Guayaquil apareció hoy (15 de junio) después de 15 días!”, decía un mensaje en redes. Su búsqueda se había vuelto viral. Había recompensa, una que fue subiendo ante la desesperación por hallarlo. Primero ofrecieron $ 500 y luego $ 1.000.

Las recompensas son un incentivo para la búsqueda y no solo son económicas. En el caso de una gata persa que se perdió a inicios de mes en Urdesa, se entregará peluquería gratis por diez meses a quien ayude a encontrarla.

La fundación Rescate Animal cuenta que en su deseo de volver a verlos, las personas no escatiman esfuerzos ni gastos. “Hemos visto anuncios en periódicos, gigantografías y letreros en la ciudad, páginas de redes sociales dedicadas a difundir la búsqueda con publicidad pagada, grupos organizados en zonas de la ciudad, además de pedir difusión en redes sociales a todas las organizaciones posibles”, explica Viviana Vásconez, quien es parte del voluntariado de esta agrupación, que tiene cuentas en Instagram, Facebook y Twitter (@AlertaMePerdí) para casos de animales perdidos.

Eso sí, pide tener cuidado, pues recuerda que hay estafadores que se aprovechan de la angustia de perder a un animal, dicen que lo tienen en otra ciudad y piden depósitos bancarios sin pruebas. Recomienda además que la búsqueda sea inmediata y que en las redes se incluya una foto de cuerpo entero de la mascota, el sexo, el color y la edad, junto con características peculiares, el lugar donde fue vista por última vez, el nombre del responsable del animal y, al menos, dos contactos telefónicos.