7 pautas para una buena salud pulmonar
Dieta sana, dejar de fumar y hacer ejercicio son algunas de las medidas de prevención que puede poner en práctica para mantener los pulmones sanos.
Los pulmones son los órganos más grandes del cuerpo y trabajan con el aparato respiratorio para permitir inspirar aire fresco, deshacerse del aire viciado e incluso hablar. Por eso es vital mantenerlos en buen estado, para evitar que la contaminación ambiental, el humo del cigarrillo, el polvo y otras sustancias tóxicas a las que estamos expuestos día a día puedan dañarlos y causar enfermedades como el asma, bronquitis, enfisema pulmonar y EPOC.
La pandemia de la COVID-19 ha mantenido a las personas en estado de alerta debido a que dicha enfermedad viral afecta las vías respiratorias, entre otros órganos, una razón más para practicar buenos hábitos de vida.
El neumólogo Iván Chérrez da algunas recomendaciones que, de practicarlas, le van a permitir conservar su
- 1. Respire adecuadamente. Hacerlo correctamente mejora la capacidad pulmonar, protegiendo al organismo de enfermedades respiratorias. Además, brinda mayor elasticidad a este órgano y favorece su resistencia ante el esfuerzo, otorgándole mayor vitalidad al corazón.
Inhale y poco a poco deje que el aire vaya bajando hacia el abdomen. A medida que el diafragma se contrae, el estómago se expande para llenar los pulmones de aire, dice la terapista física Elizabeth Martillo.
- 2. Use mascarilla. Aunque se la utiliza principalmente como medio de protección contra la COVID-19, su uso también protege contra el esmog, el humo del cigarrillo, el polvo y los gases tóxicos que emanan de las industrias, “evitando que por la nariz ingrese una mayor cantidad de sustancias nocivas. De hecho, el uso de este accesorio ha permitido disminuir las afecciones gripales”, dice el doctor Chérrez.
- 3. Limpie sus fosas nasales. Si después de haber estado expuesto a lugares muy contaminados experimenta molestias en su nariz, como la producción de mocos, picor y lagrimeos, límpielas con suero fisiológico, en espray o gotas, de venta libre. Solo basta un puff o varias gotas para recuperarse. Si los síntomas persisten, consulte a su médico.
- 4. Vigile su peso. El exceso de grasa, especialmente la que se acumula en el abdomen, dificulta la respiración. Recuerde que los obesos tienen más riesgos de complicaciones ante la COVID-19. Por eso, no a los kilos de más.
- 5. ¡Muévase! Realizar ejercicios es una buena alternativa para fortalecer la salud pulmonar. Además se benefician todos los sistemas del organismo, como el cardiovascular, neurológico, etc.
Y no tiene que ir al gimnasio. Puede elegir entre trotar, correr, bailar o simplemente caminar al aire libre, mínimo 3 veces a la semana, media hora.
Visitar la playa o el campo, donde podrá respirar aire menos contaminado, es una buena idea que, además, lo libera del estrés”, recalca la fisioterapista Martillo.
- 6. Coma sano. Lleve a su boca productos saludables. Que no le falten frutas y vegetales como brócoli, kiwi, arándanos; además de pimienta negra, cúrcuma, aceitunas. Y evitar, o no abusar, del consumo de grasas, harinas y azúcares.
Incluya aminoácidos como la glutamina y arginina, que ayudan con la composición de las proteínas y se pueden encontrar en los pescados, huevos y lácteos. Un estudio publicado en la revista Nutrients señala que la glutamina disminuye la inflamación pulmonar y reduce la estadía en los hospitales a las personas que han sido sometidas a cirugías.
- 7. Vaporizaciones con hierbas medicinales. La terapia de vapor, o inhalación de vapor de agua (o con alguna hierba como el eucalipto), ayuda a descongestionar o abrir las vías respiratorias y a que los pulmones drenen la mucosidad. Las infusiones calientes consiguen el mismo efecto. “Son terapias no invasivas que no hacen daño. Y si la persona se siente mejor con estas, pues que las utilice”, dice Chérrez.