Los mejores desayunos para activar el metabolismo
Conozca cuáles son los alimentos infaltables para que sus mañanas garanticen días activos
y nutritivos.
Los expertos dicen que el desayuno es la comida más importante del día, sin embargo, cada mañana está llena de imprevistos que alejan la atención de lo que se ingiere. Un café tibio y un bocado de pan, en el mejor de los casos, se cree que es lo suficiente para iniciar la jornada.
Este hábito sumado a un estilo de vida sedentario hace que, aunque usted haya despertado, su organismo continúe durmiendo y su metabolismo funcione aún más lento.
Y es que, precisamente, el metabolismo es lo que, por medio de mecanismos físicos y químicos, permite la transformación de alimentos en nutrientes beneficiosos para el cuerpo y administra la energía para renovar estructuras internas.
Si este proceso es rápido, logrará mantener un peso ideal y, por lo tanto, una figura esbelta, y allí es donde el desayuno juega un papel fundamental.
Desayunar (bien) tiene la capacidad de que su proceso metabólico se acelere.
“El desayuno mejora el rendimiento físico y mantiene ese buen estado de salud que todos debemos tener. Ayuda a conseguir el peso normal, mejora la estructura de la masa ósea e incrementa el rendimiento escolar en niños y el laboral en los adultos”, enfatiza Martha Celi, directora de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil.
¿Por qué no debe saltarse las comidas?
Usted ha pasado horas en su cama durmiendo, sin gastar energía, pero también sin alimentarse. Al despertar, su cuerpo necesita sí o sí ese combustible para empezar el día de la mejor manera, y esto lo encuentra en los alimentos que ingiere en la mañana.
Un desayuno completo puede llegar a contribuir por lo menos en un 25 % todo el consumo de un día. Es decir, el 25 % de la comida del día debería ser recibida en ese momento
Y aunque las personas tienen la idea equivocada de que la mejor manera de adelgazar es dejar de comer o saltarse comidas, esto puede traer resultados con efecto contrario.
“Se ha observado que saltarse esta comida se va a relacionar con un mayor riesgo de obesidad. Si lo pasamos por alto, nos toca aumentar la ingesta de alimentos durante el almuerzo y la merienda”, indica la catedrática Adriana Yaguachi.
Por ese motivo, lo recomendable es distribuir los alimentos como mínimo en tres tiempos, lo que va a permitir que la energía esté presente siempre en el organismo. Y, además, procurar que el desayuno incorpore cinco grupos de alimentos: lácteos, cereales, frutas, carnes y grasas.
Balance energético es la clave
Los alimentos que ingresan al cuerpo y lo que se gasta energéticamente es lo que se conoce como el balance energético que la mayoría de veces está desfasado, debido a que hay mucha comida que entra y poca que se gasta.
“Usted debe conocer su organismo y encontrar ese equilibrio. Una persona que se alimenta con un desayuno o almuerzo copioso que todos los días camina, quema energía y en la noche hace ejercicio o yoga está en un balance”, menciona Cora Gallardo Crusellas, especialista en nutrición y dietética y chef profesional.
“Cada persona debería ser observador de su cuerpo para lograr un desgaste equilibrado que lo ayude a mantener un nivel de vida saludable y un peso ideal”, explica la experta.
Y como la comida por sí sola no puede garantizar los resultados que espera al 100 %, la doctora Gallardo aconseja que a su estilo de vida agregue lo siguiente.
- Duerma de 7 a 8 horas diariamente.
- Haga ejercicio, preferible en la mañana antes de ir a trabajar.
- Evite las grasas trans y bebidas azucaradas.
- Tenga en cuenta las porciones.
- Tome té verde.
- Hidrátese frecuentemente, sobre todo a partir de los 60 años hay una mayor necesidad de hidratación.
- Lea las etiquetas de lo que consume.
Síntomas de un metabolismo lento
“La vida apurada no conduce a nada saludable”, sentencia Gallardo e indica cuáles son las señales de que su metabolismo es lento:
- Sentir cansancio y fatiga.
- Tener estreñimiento.
- Pesadez al despertarse.
- Tendencia a deprimirse.
- Acumulación de grasa en caderas o en piernas.
Cómo hacerlo
Acostumbrados al pique y pase, lo más fácil a la hora de desayunar será esa galleta empaquetada o algún alimento procesado, y aunque en ese momento pueda ser la solución ante el “corre corre” de las mañanas, lo cierto es que precisamente esa costumbre es la que pasa factura en la salud futura, por lo que los nutricionistas aconsejan organizarse y encontrar el tiempo para prepararse un buen desayuno saludable.
Si se le acabaron las ideas, colocamos algunas opciones recomendadas por la chef
- 1 taza de leche descremada o de almendras, 1 tortilla pequeña de verde, 1 pedazo pequeño de queso bajo en grasas, 1 taza de café, 1 huevo duro, 1 manzana.
- Cereal que tenga fibra, 1 taza de yogur bajo en grasas, 1 pera, 1 pedazo de jamón, 1 porción pequeña de nueces (5)
- 1/8 de aguacate, 1 rodaja de pan masa madre, 1 huevo tibio, 1 pedazo de melón o piña.
- 1 salchicha de soya, medio banano, 1 taza de café con leche descremada, 1 pedazo de chocolate amargo.