Sexy Fish: Fiesta y comida en un solo lugar
Expreso Doble. Este restaurante-discoteca busca dar una experiencia de mar, comida con sentido y una parranda
Hay momentos en que se llega a una edad, mira el mundo y dice: “me habría gustado probar esto”. Y es posible que también se diga: “cuánto me gustaría ser joven para saber de qué gozan las nuevas generaciones”. En el Quito de los años 80, la ciudad ofrecía poco para los jóvenes más allá de las pocas peñas, discotecas, bares y restaurantes que había. Y la capital tampoco tenía muchos lugares en donde se comiera y se bailara a la vez. Son esos restaurantes-discotecas que hay en algunas ciudades -Buenos Aires, por ejemplo- en donde se puede disfrutar de una buena cena, se toma unas copas de vino, quizá algún cóctel exótico o el clásico whisky en las rocas hasta que la música comienza a subir de volumen. Entonces, se hace inevitable bailar.
Para ello, el lugar debe tener la diversión como un propósito, porque nada hay más difícil que animar a la gente a moverse con la música tras comer, al menos que sea una boda, una graduación o una fiesta de quince años, las fiestas de Quito o las cenas bailables por Año Nuevo. Son esas ocasiones que están hechas para congregar amigos y familiares por una misma causa. Esto es diferente, una alternativa de un restaurante-discoteca que abrió sus puertas al comenzar este 2024 y que tiene un nombre singular, Sexy Fish, con una sirena a la vista del público que está por ingresar tras un gran vidrio, como un acuario.
El Triperío: El sabroso desafío a un clásico ‘inmutable’
Leer másLa primera pregunta que viene a la mente es la razón del nombre y presentación. Lenin Zúñiga, su administrador nos explica: “Nos dimos cuenta que en Quito no existe una localidad que pueda dar una experiencia de estar debajo del mar. Además, nuestro emblema es una sirena porque el local está direccionado para las chicas, para que vengan a cenar, a disfrutar de un lugar acogedor, en donde se sientan seguras”.
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Apenas se ingresa, un ambiente azul tenue y burbujas de luz envuelven al cliente. Pantallas alargadas rodean las paredes. La barra de 360 grados tiene en el medio una cascada de agua. La decoración está hecha de medusas y sirenas. El nombre cruza la carta como platos insignias y hasta un vino Sexy Fish, de la bodega argentina Norton.
EXPRESO DOBLE llegó al lugar pensando en su cocina, en las posibilidades que ofrece el sitio para comer. Allí se encuentra un equipo de chefs, dirigido por Edgar Morales, que desde la serenidad y la buena onda hacen que la comida sea entendible, con buen gusto, sin llegar a los extremos en nombre de la innovación. Es una cocina pensada y da gusto saber que va en esa dirección. Después, a bailar hasta las 04:00. ¡Es un plan!
Sobre el chef
Es de Barquisimeto, Venezuela. Estudió gastronomía en el Centro de Artes Culinarios de su ciudad y luego trabajó en una de las grandes cadenas hoteleras. Como suelen hacerlo muchos chefs, estuvo peregrinando por el mundo: Curazao, Trinidad y Tobago, Brasil y Argentina. Cuando volvió a su país, a su esposa le ofrecieron un trabajo en un hotel de Quito y se vinieron.
Pulpo al grill
Este plato fue el más gustoso de la tarde y la muestra de que muchas veces un plato no requiere de demasiado aspavientos para ser sabroso. El pulpo, de origen peruano, tuvo una larga cocción previa a su paso a la parrilla. La textura estuvo en su punto perfecto y su sabor, con un toque de chimichurri, hacía que uno la devorara. Lo interesante fue la acidez que le daba la arrabbiata, la tradicional salsa romana y que servía como cama del pulpo; le daba un perfume superior el plato y a ratos hasta pensaba en que era una pizza al probarlo. No menos buenos fueron los vegetales grillados, también al chimichurri como guarnición: zucchini, espárragos y tomates cherry.
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Poseidón Roll
Dos opciones nos ofrecieron como makis para probar: Sexy Fish, el plato insignia, y el Poseidón Roll, que elegimos para la foto. Fue una difícil selección porque ambos eran interesantes, pero la untuosidad del Poseidón fue algo que nos cautivó de inmediato. A lo crocante del roll, se le contrastaba con un queso crema que tenía, a su vez, camarón crocante. El Sexy Fish, en cambio, viene con una salsa, que tiene langostino, calamar y camarón. Cualquiera de los dos, recomendado.
Bife de chorizo
Este es un clásico y siempre es una buena opción si está en el menú. La carne tenía una buena textura. El fuego, avivado por el chimichurri con que embadurnan la carne, le da más potencia sin que se pierda el sabor de este corte tan preciado. Acá lo fantástico fue el puré de papa. Sencillo, pero a la vista parecía un pan al vapor chino, perfectamente redondo. “Es el milagro de la mantequilla”, decían. Y uno siente una firmeza en el exterior y la suavidad del interior: ¡una delicia!
Hay equipo
El equipo de cocina irradia buena onda. Se siente ese respeto por la profesión y un gran sentido del humor, como se puede notar en la foto. Y eso es algo que inevitablemente se percibió en cada uno de los platos que prepararon para los lectores de EXPRESO DOBLE.
Servicios
- Dirección: Avenida América y República, esquina.
- Servicios: Tiene un amplio estacionamiento y ofrece ‘valet parking’ gratis.
- Horario de atención: De miércoles a domingo, de 13:00 hasta las 04:00. El baile arranca a la noche.
- Valores: El Sexy Fish vale 12 dólares y el Poseidón Roll, 15. El pulpo al grill cuesta 22 y el bife de chorizo 18. Los cócteles tienen un promedio de 12 dólares.
- Reservas: 0992532340
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