Tipos de fragancias en perfumes: ¿Cuál es tu favorito?
Al acercarnos a alguien, esperamos que huela bien y tenga un aroma agradable, dejando una impresión duradera
En un mundo digital, lleno de imágenes y sonidos, el sentido del olfato a menudo recibe menos atención. Sin embargo, los olores y los perfumes son temas fascinantes que merecen nuestro interés. Las fragancias corporales tienen una larga historia, comenzando casi con el inicio de la civilización. Los egipcios, por ejemplo, ya usaban aceites y ungüentos aromáticos en rituales religiosos y para el cuidado personal, basándose en resinas, flores y especias.
Durante la Edad Media en Europa, el uso de perfumes disminuyó, pero en el mundo árabe se perfeccionaron las técnicas de destilación y se desarrollaron nuevas fragancias. En el Renacimiento, los aromas resurgieron en Europa con nuevas y sofisticadas composiciones. Con la Revolución Industrial en el siglo XIX, la producción de perfumes se expandió, haciéndolos accesibles a un público más amplio.
Clasificación de los olores
En 2013, un estudio realizado por el profesor Jason Castro de la Universidad de Bates y el profesor Chakra Chennubhotla de la Universidad de Pittsburgh, publicado en la revista PLOS ONE, propuso un modelo que clasifica los olores en 10 categorías. Aunque los autores reconocen que esta propuesta no es definitiva, la consideran bastante precisa.
Las 10 categorías de olores propuestas son:
- Floral: Aromas de flores como rosa y jazmín.
- Leñoso o resinoso: Notas amaderadas como sándalo y cedro.
- Frutal: Olores de frutas no cítricas.
- Químico: Aromas similares a productos de limpieza.
- Mentolado: Olores de eucalipto o menta.
- Dulce: Aromas como caramelo, canela y vainilla.
- Quemado o ahumado: Olores asociados a alimentos como palomitas de maíz.
- Cítrico: Notas de limón, naranja y mandarina.
- Acre o rancio: Olores en mal estado.
- Descompuesto: Olores a podrido.
Perfumes según su presentación
Los perfumes también se clasifican según su concentración de alcohol y aceites esenciales. Esta concentración afecta la duración del perfume en la piel y su precio. Conocer estas concentraciones te ayudará a elegir la opción más adecuada para cada ocasión. Aunque diferentes concentraciones pueden pertenecer a la misma fragancia y tener el mismo nombre comercial, pueden presentar ligeras variaciones en el aroma.
- Elixir: La versión más concentrada, con un 30 %. Generalmente se vende en frascos pequeños de 30 ml. y puede durar todo el día sin necesidad de retoques.
- Perfume: Con una concentración entre el 20 % y el 30 % de aceites esenciales. Dura alrededor de 8 horas y es ideal para climas fríos.
- Eau de Parfum: Contiene entre el 15 % y el 20 % de aceites aromáticos. Su duración es de 5 a 6 horas, siendo ideal para espacios pequeños.
- Eau de Toilette: Tiene una concentración entre el 5 % y el 15 %, permaneciendo en la piel entre 2 a 3 horas. Muy útil para espacios abiertos.
- Colonia: Con una concentración entre el 5 % y el 7 %, es ideal para climas cálidos, ya que el calor resalta sus compuestos.
- Splash: Contiene solo un 1 % al 3 % de concentración. Dura aproximadamente una hora y es ideal para ocasiones informales.
Perfumes según su fragancia
Los perfumes se dividen en varias familias de fragancias, cada una con características únicas. Dentro de cada familia, hay subcategorías y combinaciones, lo que permite una amplia gama de opciones para adaptarse a gustos personales.
- Cítricos: Frescos y vibrantes, con notas de limón, naranja, bergamota y pomelo. Ideales para el uso diario y climas cálidos.
- Florales: Aromas predominantes de flores como rosa, jazmín, lavanda y peonía. Suelen ser románticos y femeninos.
- Amaderados: Incluyen notas de madera como sándalo, cedro y vetiver. Suelen ser cálidos y elegantes.
- Orientales: Caracterizados por notas exóticas como vainilla, ámbar y especias. Son intensos y seductores.
- Frescos: Incluyen notas de hierbas, menta y agua. Son ligeros y revitalizantes.
- Acuáticos: Evocan el frescor del mar y la brisa marina, con notas que recuerdan a algas y agua de mar.
- Especiados: Incorporan especias como canela, clavo y pimienta. Suelen ser cálidos y exóticos.
- Frutales: Con notas de frutas como manzana, melocotón y frutos rojos. Son alegres y juveniles.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!
