La limpieza diaria del rostro es fundamental
Protéjase de la radiación ultravioleta con factor de protección solar, de 30 en adelanteShutterstock

Tips antiaging

‘Prevenir’ es la clave. Por eso debe empezar a cuidarse cuanto antes para lucir una tez perfecta y radiante en todas las etapas de la vida.

Si le prodiga los cuidados necesarios a su piel es posible llegar a la adultez con buenas reservas de sustancias que le otorguen turgencia, lozanía y firmeza. El envejecimiento (arrugas y manchas) es un proceso que está relacionado con factores intrínsecos como la raza, la actividad hormonal (menopausia) y los genes que, al irse deteriorando, provocan cambios en la producción de colágeno y ácido hialurónico. También inciden las alteraciones extrínsecas como la radiación ultravioleta, culpable del 80 % del envejecimiento, la exposición al humo del cigarrillo y la contaminación ambiental, que se pueden evitar y atenuar con la práctica de los siguientes hábitos, dice la dermatóloga chilena Carmen Gloria González.

El Ritual

Limpiar la piel del cutis máximo 2 veces al día con productos especiales que eliminen el exceso de sebo y la suciedad, y la dejen lista para los principios activos y moléculas que van a ayudar a prevenir que la piel sume años.

Utilizar cremas con ceramidas, principal lípido de la piel que la mantiene humectada, al evitar que se pierda electrolitos, agua y proteínas. “Cuando los niveles de ceramidas son bajos se forman verdaderos poros en la piel que permiten el ingreso de virus, bacterias y suciedad, tornándola seca”.

Otro componente es el ácido hialurónico, que está en la piel y actúa como una esponja que atrae agua, acción que hace que el cutis se vea tonificado. Mientras que el colágeno le da firmeza, dice González, miembro de la Academia Americana de Dermatología.

Protéjase de la radiación UV y UVB. Exponerse al sol (de 10:00 a 16:00) sin la protección debida es una severa agresión para su piel, cuyo daño es acumulativo, principalmente durante los primeros 18 años de vida. Son dos los tipos de radiación solar: los rayos UVB, que son los que producen el cáncer de piel y se los combate usando FPS mayores a 30; y los UVA, que son muy agresivos, porque penetran el vidrio (por ejemplo, el parabrisas del auto) y son los culpables de arrugas y manchas prematuras. Para protegerse de ellos hay que usar un producto que diga de ‘amplio espectro’. Y también una buena cantidad de crema. Para la cara, una cucharita de té es suficiente y reaplicar cada 2 o 3 horas, incluso en los días no soleados. 

A los bebés hay que protegerlos desde los 6 meses de edad con FPS (factor de protección solar) especiales que lleven la palabra mineral, que equivale a no tener filtros químicos, ideales para piel sensible.

Beba agua, es fundamental hacerlo, entre 6 y 8 vasos al día.

La alimentación. De nada sirven los tratamientos más caros si no se cuida internamente. Incorpore en la dieta frutas, verduras, granos, legumbres y evite lo refinado (pan, frituras, tortas, productos industrializados), porque estimulan la producción de radicales libres, que son los causantes de que la piel sume años. Prefiera el vino tinto porque en comparación con el blanco es rico en antioxidantes, que también los tiene el chocolate negro ecuatoriano (entre 60 y 70 %). Consumir 2 a 3 cuadritos (de una barra) 3 veces a la semana. es suficiente.

No fume. Ni se acerque al fumador. El cigarrillo, como una tijera, corta, literalmente, el colágeno. Es el causante de las arrugas periorales (o código de barra) y el tono amarillo de la piel. Las mujeres que fuman no pueden beneficiarse satisfactoriamente de tratamientos estéticos o quirúrgicos, como un lifting o levantamiento de párpados, porque tienen pésima cicatrización, ya que no forman colágeno.

  • Las ceramidas

Son lípidos (grasas) que se encuentran de manera natural en la piel y son esenciales para garantizar sus propiedades de barrera y mantener la hidratación.

Recuerde, dice González, que el sol, el clima y la edad, así como las patologías cutáneas más comunes (sequedad, irritación, rojez, descamación), están relacionadas con un déficit de esas sustancias, que es posible reponer con el uso de productos que contengan ceramidas.