¿Es posible clonar a mi mascota? Descubre dónde y cuánto cuesta
El futuro de la biotecnología emocional en mascotas está revolucionando el mundo
La clonación de mascotas, una posibilidad que parecía lejana hace algunos años, es hoy una realidad en auge. Desde que en 1997 la oveja Dolly se convirtió en el primer mamífero clonado a partir de una célula adulta, el avance en biotecnología ha permitido que cada vez más personas se interesen en esta opción.
Impulsada por la profunda conexión emocional entre los humanos y sus animales de compañía, la clonación de mascotas se ha convertido en una industria en crecimiento, especialmente en países como Estados Unidos, China, Corea del Sur y algunas naciones europeas.
Empresas especializadas como Gemini Genetics en Reino Unido y Ovoclone en España ofrecen servicios de clonación para perros, gatos y caballos, brindando a sus dueños la opción de crear una réplica genética casi idéntica de sus compañeros.
El proceso, complejo y costoso, involucra tecnología de preservación genética avanzada y protocolos éticos para asegurar el bienestar animal en cada paso.
Clonación: Un procedimiento de alta precisión
El procedimiento de clonación comienza con la recolección de una muestra de tejido del animal que se desea clonar, la cual debe realizarse en los primeros cinco días posteriores al fallecimiento.
Este tejido se congela criogénicamente en tanques de nitrógeno líquido a temperaturas extremas (-196°C), conservando así el material genético. Posteriormente, las células recolectadas se cultivan y almacenan para garantizar su integridad antes de ser utilizadas en el proceso de clonación.
Una vez que el material genético está listo, se realiza la transferencia de núcleo, el ADN del animal donante se transfiere a un óvulo vacío que, al comenzar a dividirse, da origen a un embrión. Este embrión se implanta en una madre sustituta, que llevará a término el embarazo y dará a luz al clon, un gemelo genético del animal original.
Costos: un servicio de lujo
La clonación de mascotas es una tecnología innovadora, pero aún está lejos de ser accesible para el público general. Clonar un perro o un gato puede costar hasta 50.000 dólares, mientras que la clonación de un caballo alcanza los 85.000 dólares.
Estas cifras, si bien son inalcanzables para muchas personas, son asumidas por aquellos que buscan preservar una conexión emocional con sus mascotas, sin importar el precio.
Empresas como Ovoclone en España también ofrecen servicios de almacenamiento genético que oscilan entre los 100 y 300 dólares anuales, asegurando que el ADN de los animales esté disponible para una futura clonación.
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