Un 'multiverso de borregos': La IA se apodera de la campaña política en Ecuador

Resulta que las campañas electorales han dado un giro de 180 grados gracias a la inteligencia artificial (IA). En un claro ejemplo lo da el movimiento político Revolución Ciudadana (RC) que ha utilizado la IA generativa de imágenes para crear imágenes de "borregos correístas".

La utilización de la inteligencia artificial en las campañas políticas ha evolucionado rápidamente en los últimos años. Ahora, no solo se trata de recopilar y analizar grandes cantidades de datos para la toma de decisiones informadas, sino que también se han incorporado herramientas más avanzadas para generar contenido visual persuasivo y efectivo. 

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En este caso, el movimiento Revolución Ciudadana ha aprovechado la IA generativa de imágenes, probablemente se trate de la tecnología MidJourney o de Adobe Firefly, para crear imágenes de borregos en diversas situaciones de la vida cotidiana, o imitando a algunos de los personajes políticos, como si de un multiverso se tratara.

Estas imágenes de corderitos, acompañadas de las etiquetas #ConLuisa y #MeeeeeGusta, han inundado las redes sociales en Ecuador, que hasta el mismo alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, publicó su propio borrego barcelonista.

Sin embargo, la incorporación de la inteligencia artificial en las campañas políticas plantea cuestiones intrigantes. Por un lado, la IA puede ser una herramienta poderosa para recopilar y analizar datos, tomar decisiones informadas y desarrollar estrategias efectivas.

Y, por otro, la política es un proceso humano que requiere diálogo y confrontación de ideas. Si la IA se convierte en la única voz dominante, ¿qué pasa con la diversidad de opiniones y el intercambio de ideas?

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Además, la privacidad de los datos también es una preocupación importante. La IA se basa en la recopilación de información personal de los individuos, lo que plantea interrogantes sobre cómo se utiliza y protege esa información.

En definitiva, la inteligencia artificial ha llegado a las campañas políticas para quedarse. Es un arma de doble filo que puede ser tanto revolucionaria como peligrosa. La clave está en encontrar un equilibrio que permita aprovechar los beneficios de la tecnología sin comprometer la integridad, la privacidad y la participación ciudadana.

Pero, ¿qué nos depara el futuro? Con el avance continuo de la tecnología, es difícil predecir hasta dónde llegará la influencia de la inteligencia artificial en las campañas políticas. ¿Veremos algún día robots como candidatos? ¿O tal vez campañas totalmente virtuales sin la presencia física de los aspirantes?

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¿QUÉ ES LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL GENERATIVA?

Una de las ramas más fascinantes de la IA es la llamada inteligencia artificial generativa. Esta se compone de sistemas y algoritmos diseñados para crear contenido original y realista, como imágenes, videos, música e incluso texto. Estos sistemas aprenden de grandes conjuntos de datos y utilizan ese conocimiento para generar nuevos elementos que imitan el estilo, la estructura y el contenido de los datos de entrenamiento.

Uno de los ejemplos más conocidos de la inteligencia artificial generativa es la tecnología conocida como MidJourney, que ha ganado popularidad en diversos campos, desde el arte y el diseño hasta la industria del entretenimiento. Este tipo de IA ha sido especialmente destacada en la creación de imágenes convincentes y realistas.

Otro de los ejemplos es Adobe Firefly, un generador que puede ser encontrado tanto en la web para su uso libre, como anexado a los softwares de Creative Cloud como Photoshop o Illustrator, el cual ha ganado popularidad por la posibilidad de crear o rellenar imágenes muy realistas sin la necesidad de promts.

La magia detrás de la inteligencia artificial generativa radica en su capacidad para aprender patrones y características distintivas de un conjunto de datos. Una vez que se ha entrenado con suficiente información, el sistema puede generar contenido nuevo a partir de ese conocimiento adquirido. En el caso de imágenes, la IA generativa puede crear desde retratos fotorrealistas hasta escenas imaginarias llenas de detalles.