Por fin se sabe cómo era el rostro de niño egipcio que murió hace 2.000 años
La reconstrucción facial revela que este 'retrato de momia' egipcia, una tradición de la época representa al niño algo mayor de lo que era al morir
En estos tiempos, la Arqueología, al igual que otras tantas ciencias, echa mano de la tecnología computarizada en sus investigaciones. Ello permite, por ejemplo, analizar territorios sin necesidad de excavaciones, determinar --con más exactitud que nunca-- la antigüedad de los hallazgos y reconstruir con precisión exacta rostros de los antiguos habitantes de este planeta.
Por ejemplo, recientemente se ha podido determinar cómo se veía la cara de un niño egipcio que vivió durante el siglo I d.C. y que fue momificafo al morir.
Investigadores europeos dieron a conocer una reconstrucción facial en 3D del pequeño que guarda un parecido sorprendente con un retrato realista que fue enterrado junto a él. Los resultados fueron publicados en Plos One.
Los primeros humanos habrían cocinado primero con aguas termales, no con fuego
Leer másA continuación una galería del fardo funerario y luego, una serie de fotos en las que se pueden ver el proceso de reconstrucción facial:
La presencia del retrato, por cierto, no sorprendió a los científicos. Fue parte de una tradición entre los siglos I y III d.C. en algunas clases sociales de la sociedad egipcia romana, de acuerdo al Museo Smithsonian.
El análisis de los huesos y dientes del esqueleto sugiere que el niño habría tenido entre 3 a 4 años en el momento de su muerte. No obstante, los científicos a cargo de la investigación indican "en un nivel subjetivo, el retrato parece un poco 'mayor'", probablemente debido a su descripción ágil de la nariz y la boca del niño.
Las similitudes entre el retrato del niño y la reconstrucción digital pueden ayudar a responder una pregunta que ha persistido desde que el arqueólogo británico WM Flinders Petrie halló varios retratos de momias en la región egipcia de Fayum a fines de la década de 1880.
Según el artículo, los nuevos hallazgos, así como la investigación previa sobre el tema, sugieren que los retratos representan a las momias enterradas junto a ellos. No obstante, los autores señalan que las pinturas no siempre representan a la persona momificada en el momento exacto de su muerte.
“Uno de los retratos muestra a un hombre joven mientras que la momia es la de un anciano con barba blanca”, escriben los investigadores, y agregan que algunos adultos pueden haber encargado un retrato antes en la vida y haberlo guardado para su uso posterior.
Para crear la reconstrucción en 3-D, los investigadores tomaron tomografías computarizadas (TC) del esqueleto de 30 pulgadas de largo encerrado en las envolturas de tela de lino. Su análisis sugirió que el niño probablemente sucumbió a una neumonía y que su cerebro y ciertos órganos internos habían sido extraídos como parte de la momificación, según Live Science.
Nerlich y sus colegas se aseguraron de que el artista que trabaja en la reconstrucción no entrara en contacto con el retrato de la momia. Esto hace que las similitudes sean aun más asombrosas e increíbles.
La reconstrucción del artista se basó en la estructura ósea del niño egipcio, así como en estudios que rastrearon el desarrollo promedio de los tejidos blandos en las caras de los niños pequeños. Los investigadores solo revelaron detalles del retrato hacia el final del proceso, cuando el artista recibió información sobre el color de ojos y el peinado del niño.
Si bien, como dijimos líneas arriba, estos retratos de momias pudieron representar cualquier edad del fallecido, en este caso las similitudes entre la reconstrucción y el retrato son tan sorprendentes que la pintura debe haber sido creada justo antes o después de la muerte del niño egipcio.