Cuenca: El posible aumento en la tarifa del pasaje genera criterios divididos

En los primeros tres informes entregados por la universidad al Municipio de Cuenca se analizan varios factores, como el costo operativo, el estado técnico de los buses y un informe económico sobre la tarifa que los cuencanos estarían dispuestos a pagar por el servicio. La información apunta a un posible incremento de al menos 50 % en el valor actual, que es de 34 centavos, de los cuales cuatro son subsidiados por la municipalidad.

Alfredo Aguilar, coordinador de Movilidad del GAD Municipal de Cuenca, puntualizó que en el informe económico levantado entre los usuarios del transporte, un 65% de los encuestados espera que la tarifa sea de máximo 35 centavos, y el 33% podría pagar hasta 40 centavos.

“Este informe no es definitivo. En las próximas tres entregas se estipulará un valor sugerido por parte de los técnicos. Todo esto deberá ser debatido por el Concejo Cantonal.

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El funcionario explicó que la municipalidad pidió que dentro del estudio también se “sugiera una nueva tarifa técnica y socialmente responsable”. Sin embargo, el incremento de 5 o 10 centavos no sería suficiente para el gremio de los transportistas.

Diego Idrovo, presidente de la Cámara de Transporte de Cuenca, justificó el alza aduciendo a que la última vez que se realizó una revisión técnica fue en 2018, cuando se subió de $ 0,25 a $0,31, un centavo subsidiado por el Municipio. “La condición para el incremento fue que debíamos renovar la flota de buses y mejorar el servicio. Hoy ya hemos cumplido y estamos arrastrando deudas”, puntualizó.

El gremio de los transportistas sostiene que vienen trabajando a pérdida. Idrovo dio a conocer que en lo que va de 2024, la mejor recaudación que tuvieron fue en mayo, cuando llegaron a los $4.855 por unidad.

En este contexto, se refirió al nuevo informe que, dice, ha establecido los egresos mensuales en $ 6.860. “Entonces la realidad nuestra es muy diferente a lo que se piensa. No estamos ganando, sino que nuestra situación económica es cada vez más difícil para sostener el servicio”, reseñó.

Para el agremiado, incluso una tarifa de $ 0,45 no cubriría todos los gastos. “Si el estudio se entrega con esta tarifa sugerida, nosotros exhortaríamos a los técnicos a que nos demuestren en números que ese monto cubrirá los gastos y nos dejará un rubro significativo de ganancia”, dijo.

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Un aspecto que ha sido solicitado por la Cámara de Transporte es que el subsidio ya no sea asumido por ellos, y que el Municipio fije una forma de generar este beneficio de manera directa. Hoy, el pasaje tiene un subsidio de cuatro centavos, los mismos que son asumidos por los transportistas al momento que el pasajero se sube a la unidad y al final de cada mes el Municipio les devuelve este pago. “Esta forma es muy larga y complicada para nosotros. Estamos a expensas de la situación económica de la municipalidad y eso nos ha representado tener que esperar varios meses hasta poder cobrar”, explicó.

Sobre esto, Aguilar puntualizó que se mantienen en diálogo constante con los agremiados para establecer la mejor manera para sostener el sistema de subsidio, destacando que “por primera vez” están al día con los pagos.

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En un recorrido, este Diario consultó a usuarios del transporte público sobre si estarían de acuerdo ante un posible incremento al valor del pasaje y cómo les afectaría esta medida, la mayoría mostró su rechazo.

Lucía Zárate, de 40 años, es madre de dos niños en edad escolar. Dice que solo ella debe tomar cuatro buses al día para ir y venir de su lugar de trabajo. Para ella, pagar, por ejemplo, 45 centavos, significa invertir al día 60 centavos más solo en su transporte.

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“Es imposible pensar que podríamos salir muy seguido todos. La situación está cada vez más complicada. Suben todos los precios, pero muchos de nosotros no contamos ni con un trabajo estable”, comentó.

Nohelia Ochoa, presidenta de la Federación de Estudiantes Universitarios de la Universidad de Cuenca, se refirió a los estudiantes de otras provincias que “tienen lo justo para pagar sus gastos diarios y todo lo que significa vivir en esta ciudad”.

La estudiante señaló que han presentado una propuesta para que los estudiantes universitarios también se beneficien de una tarifa diferenciada, como la tienen los estudiantes secundarios, los niños y las personas de grupos vulnerables.

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