Justin Cornejo
Justin Cornejo en el marcador del estadio Monumental, se le rindió un homenaje.Miguel Canales

Ariel Holan: "No es fácil jugar mientras están velando a un amigo"

El entrenador de Barcelona valoró el estado mental de sus jugadores

La noche del 17 de julio del 2024, en el Estadio Monumental se sentía especialmente fría, no solo por el clima, sino por el ambiente cargado de emociones y tristeza. Barcelona había empatado 1-1 con Bragantino por la Copa Sudamericana, pero el resultado del partido era lo menos importante para los presentes.

Ariel Holan, el entrenador de Barcelona, tomó el micrófono al final del partido. Vestido de negro, reflejando el luto que todos compartían, sus palabras resonaron con una mezcla de dolor y respeto. “Quisiera que valoren lo que los jugadores hicieron. No es fácil jugar mientras están velando a un amigo. Ninguno de nosotros tenía voluntad de venir a jugar, esa es la verdad. Estamos destruidos”, manifestó con la voz quebrada.

Ellos jugaban y a Justin lo velaban

Damián Díaz (d) defiende ante el ataque de un rival
Damián Díaz (d) defiende ante el ataque de un jugador de BragantinoMiguel Canales / Expreso

Las declaraciones de Holan llegaron al corazón de todos. Mientras él hablaba, el cuerpo de Justin Cornejo, su ex dirigido, era velado y sepultado el 18 de julio del 2024, al norte de Guayaquil.

La tragedia se cernía sobre el equipo, y la fortaleza mostrada por los jugadores en el campo era digna de admiración. “Jugamos contra un equipo muy duro. Nosotros aprovechamos muy bien el tiempo de receso, me parece que el equipo lo hizo excelente en el primer tiempo. Creo que el segundo tiempo fue diferente y debemos corregir para el partido de vuelta”, añadió Holan, tratando de mantener la compostura y enfocarse en el análisis futbolístico.

Barcelona mostró coraje y determinación, a pesar de la pesada carga emocional que llevaban. Holan reconoció esto: “Valoro mucho el partido de los jugadores. De pronto no estuvimos finos, pero jugamos la mayor parte en la zona de arriba y eso aumentó el volumen de juego”. Sus palabras no solo destacaron el esfuerzo en el campo, sino también la resiliencia del equipo en un momento tan difícil.

Tenían su mente en lo que le paso a su amigo

La noche terminó con un empate en el marcador, pero con un triunfo del espíritu y la humanidad en el corazón de todos los presentes. Holan y su equipo mostraron que el fútbol es más que un juego; es un reflejo de la vida misma, con todas sus alegrías y tristezas, sus victorias y derrotas.

Y en esa noche en el Monumental, quedó claro que la verdadera fortaleza se encuentra en el corazón, el 24 de julio del 2024, Barcelona tiene una cita con la historia, deberá de buscar la clasificación a los octavos de final de la Copa Sudamericana.

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