Barcelona: Diego López y un ‘rompecabezas’ ante Independiente
El técnico de Barcelona siente la presión en el Ídolo por algunas bajas y desatenciones. Espera a los Rayados en el Monumental
El estratega uruguayo de Barcelona, Diego López, se enfrenta a varios problemas para lo que será el cotejo por la fecha 3 de la Segunda Etapa de la LigaPro 2023 ante Independiente del Valle este viernes 18 de agosto, desde las 20:00, en el estadio Banco Pichincha.
De entre los varios ‘pendientes’ que se desprenden consta uno como principal o más inmediato: solventar las ausencias de los jugadores canarios Segundo Portocarrero y Pedro Perlaza, quienes fueron expulsados ante Delfín en el partido pasado.
La falta de estos dos elementos en ese puesto podría causar grandes repercusiones, debido a que López les tenía confianza y eran recurrentes y vitales en ese sector de la cancha.
Al respecto, el estratega amarillo ya comentó después del compromiso y exteriorizó su preocupación. “Con dos menos teníamos que todos darnos una mano”, precisó. De ahí que le dio las gracias a Burrai, quien “tuvo un buen partido” y los ‘salvó’ en varias oportunidades de la contienda.
Otro de los dilemas del DT es que algunos de sus ‘muchachos’ están tardando en poner en práctica lo que el dirigente pide.
López lo dijo después del empate ante Delfín: “Tuvimos muchos errores técnicos, hablé con los jugadores en el entretiempo. Les dije que hay que revertir el marcador siendo más punzantes en el área”. Pocos o nadie le hicieron caso.
“Creo que no se jugó un buen partido (ante Delfín), sobre todo en el primer tiempo porque tuvimos muchos errores técnicos. Hablé con los jugadores en el descanso y les dije que había que revertir el marcador siendo más punzantes en el área rival. El rival también juega y si le dan muchas chances te va a crear ocasiones de peligro”, precisó el timonel.
Ya pensando en el futuro, el uruguayo solo tiene 13 partidos por jugar y si pierde o empata, lo que comenzó como un triunfo ante Gualaceo en el arranque de la segunda etapa, bien podría convertirse en una pesadilla al perder la punta del torneo.
Pese a todo esto, el estratega del Ídolo intenta no pensar a futuro y trabajar en el día a día. Destaca las ganas de los jugadores que nunca bajaron los brazos. “Fuimos haciendo los cambios conforme lo íbamos viendo físicamente. Llevamos el partido tratando de buscar una pelota quieta para poder llegar”.
