Claudio Villanueva, un cambio necesario
El marchista ecuatoriano pasará de los 50 km a los 35 km para poder llegar a París 2024. El 2021 ya lo cerró. Trabaja en su rehabilitación
Claudio Villanueva se quedó con un sabor agridulce después de su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Soñaba con colgarse una medalla, pero las lesiones se cruzaron en su camino y no le dejaron demostrar su potencial.
El marchista cuencano, ahora más tranquilo, en Quito, cuenta que arrastraba problemas físicos hace dos años (rotura de isquiotibiales, bursitis y tendinitis en sus dos rodillas); de ahí que un mes antes de encarar la prueba de 50 kilómetros en territorio asiático ya sabía que no podía dar su máximo ritmo.
Tokio fue la segunda cita olímpica para Villanueva, de 33 años (antes estuvo en Río 2016). Por esa razón, sus aspiraciones eran altas y, a pesar de sus dolencias físicas, no estaba en sus planes retirarse de la prueba.
“Fue un poco de impotencia también porque mi corazón, alma y mente querían dar todo, pero mis piernas no podían dar el ritmo que yo quería. Por eso, que en mi mente estaba terminar la prueba, no importaba que estuviera lesionado. Soñaba con ganar una medalla”.
Claudio reconoce con humildad que se sentía como uno de los favoritos en los 50 kilómetros, ya que a Tokio clasificó con un tiempo de 3 horas con 47 minutos y el ganador de esta prueba, el polaco Dawid Tomala, lo hizo finalmente con un crono de 3 horas con 50 minutos.
“Solo Dios sabe lo que me tiene previsto. Esta vez no se pudo, aunque llegaba con buen tiempo a los Juegos Olímpicos. Ahora hay que seguir trabajando duro durante los próximos tres años para llegar en buena forma a París 2024. Quiero mi medalla”.
Hoy en día, Claudio está concentrado en recuperarse de sus lesiones, razón por la cual está radicando en Quito, donde deberá hacer rehabilitación durante dos meses. En este 2021 ya no hay más competencias para la categoría sénior de atletismo.
“En dos meses me volverán a ver realizando trabajos físicos, trotando y marchando. Ahora estoy parado totalmente porque estoy realizando mi rehabilitación con la gente del Ministerio del Deporte. Mi recuperación la haré en Quito. Quiero estar bien para el otro año ”, comenta.
Pese a la paralización, la mente del andarín ya está maquinando. En los Olímpicos de París 2024 la prueba de 50 kilómetros marcha será modificada, el recorrido disminuirá a 35, por lo que Claudio cambiará su estrategia de entrenamiento.
“El fondo ya lo tengo porque he corrido en muchas pruebas de 50 k. Ahora buscaré ganar velocidad porque todas las pruebas serán de 35 kilómetros. Habrá que hacer repeticiones más cortas y cambiar el entrenamiento. Ya tenemos la estrategia, pero no se las puedo revelar porque la competencia después la copia”, asevera entre risas.
El marchista tendrá una agenda apretada de competencias el próximo año. Empezará con el Nacional Ecuatoriano, luego disputará los Juegos Sudamericanos y Bolivarianos. Además, de dos mundiales de marcha.
“Esperemos que todo nos salga bien. Son tres años cortos que tengo para prepararme bien porque en París me veo nuevamente como favorito. Quiero subirme al podio de los ganadores”.