Copa Libertadores: Alex y Altair, una sola fe, dos equipos para ser campeones
Un hincha del Flamengo y otro del Athletico Paranaense acudieron a la iglesia San Francisco para pedir un "empujoncitot divino"
Los brasileños de Flamengo y Athletico Paranaense han hecho de todo en Guayaquil. Unos se terminaron la cerveza de los bares de Puerto Santa Ana y otros devoraron el arroz con menestra; sin embargo, la parte sublime y de fe la pusieron este miércoles 26 de octubre dos fanáticos que llegaron para postrarse ante Deus (Dios, en portugués) para que les ‘dé la mano’, cada uno pidiendo por su equipo para ser campeón de la Copa Libertadores.
Copa Libertadores: El carnaval se traslada a Guayaquil por la gran final
Leer más“Pai nosso que estais no céu, santificado seja o vosso nome”, fue la frase del padrenuestro en su idioma que se escuchó en la boca de Alex, hincha del Fla, y de Altair Siquiera, aficionado del Athlético Paranaense, en la iglesia San Francisco, en la intersección de las calles 9 de Octubre y Pedro Carbo, pleno centro de Guayaquil.
Ambos tenían solo horas de haber llegado al país. Luego de orar, Alex contó que rezó tres padrenuestro y que agradeció por encontrarse sin novedades en un país que no es el suyo.
“Que Deus ilumine a todos los jugadores, venimos para ser campeones; mis oraciones van para mi Fla, solo pedimos la ayuda para ganar la Copa”, manifestó emocionado Alex, quien después de la misa se fue a conocer la ciudad.
Para Altair Siqueira, la fe es primordial. Asegura que Brasil es un país bastante religioso y que un “empujoncito divino” nunca viene mal.
“He orado mucho”, señala. “Vengo para ser campeón, tenemos un buen elenco, pero sabemos que todo se hace posible si Dios lo permite”, expresó convencido el aficionado del Paranaense.
Copa Libertadores: Al Paranaense lo recibieron como en casa
Leer másLa presencia en la iglesia de los aficionados brasileños no pasó desapercibida. Las camisetas con las que se identificaban y las banderas que colgaban de sus mochilas viajeras llamaron la atención y más de un ecuatoriano opinó. Daniel Andrade, hincha de Barcelona, salió de la misa y en voz baja dijo: “Esto es digno de ver, muchos vinieron solo para la borrachera, pero ellos le están dando las gracias a Dios por estar aquí, eso es bueno”.
Y es que en el fútbol todo se vale, solo hay que esperar el sábado en la noche para ver si “Deus é de Flamengo” o “Deus é de Paranaense”, como dijeron Alex y Altair.