Entrenamiento en época de emergencia

Hay disciplinas deportivas que, por sus cualidades, son imposibles de reemplazar con ejercicios en casa. El surf, la natación, el atletismo y el béisbol, por ejemplo, son deportes que no se pueden hacer en espacio reducido, sobre todo sin los implementos necesarios.

Por otro lado, el boxeo es más accesible , pero de todas maneras requiere de trabajos específicos para que el deportista no pierda su ritmo, explicó el pugilista Abel Mina. 

De todas formas, el aislamiento ante la pandemia del coronavirus ha puesto en apuros a los deportistas ecuatorianos, que buscan la manera de mantenerse en forma, pese a que todos coinciden en que ningún entrenamiento casero se asemejará al trabajo completo realizado en gimnasios, pistas o piscinas.

El marchista David Hurtado, por ejemplo, contó que la manera de mantener su estado físico sería con una caminadora en casa, pero él no tiene una.

La surfista Dominic Barona también conversó con este Diario sobre la pérdida de continuidad que le ha representado el aislamiento, pese a que vive frente a la playa. Al igual que la nadadora Samantha Arévalo, quien necesita del agua para poder mantenerse en forma pero, para sortear la situación, hace acondicionamiento físico en casa, lejos de su familia, con las herramientas que tiene a la mano.

Barona lleva dos semanas sin olas

Dominic Barona entrena a doble jornada, en la mañana y en la noche. Hace abdominales, flexiones de pecho, sentadillas y pesas, pero han pasado dos semanas desde la última vez que entró al mar y, además de perder práctica en su deporte, siente que ha perdido parte de su vida.

“Surfear no solo es un deporte para mí. Vivo de eso y es mi estilo de vida. Antes yo surfeaba tres veces al día”. Pero, para no perder fuerza en las piernas, donde radica lo más importante para mantener el equilibrio sobre la tabla en las olas, Barona hace ejercicios para muslos y pantorrillas.

La deportista contó que pidió un salvoconducto para que le permitan surfear, pero este le fue negado. “Volví de viaje y me sometí a mi cuarentena. Estuve 15 días sin salir de casa y nunca presenté síntomas, así que averigüé la posibilidad, ya que vivo en frente de la playa”.

Sin embargo, Barona comprende por qué las autoridades están tan estrictas con la emergencia sanitaria. “Esto se ha salido de control. Es mejor que nadie salga de casa”. Dedicará estos días para lavar y pulir sus tablas de surf.

Boxeo contra una pared de cemento

Su entrenamiento consiste en lanzar puños a una pared de cemento, ya que en casa no tiene los implementos apropiados para practicar el boxeo. Además, Abel Mina tiene una pequeña terraza, la cual aprovecha para recorrer en varias vueltas.

“El boxeo es asequible porque se puede golpear la pared o un saco de arroz. Pero siempre hará falta salir al parque a trotar, parte fundamental del entrenamiento”, contó.

Aunque tiene su terraza, el espacio es muy reducido para aumentar la velocidad de sus pasos. Pero, para complementar su ejercicio diario, Mina hace abdominales, una larga serie de sentadillas y varios ejercicios para fortalecer los músculos de las piernas.

Tenía previsto pelear por su segundo título nacional en abril, pero el combate debió ser pospuesto. “Es una medida apropiada. Estoy ansioso por enfrentar esa pelea, pero es necesario que todo quede suspendido, por nuestro propio bien”.

Por lo pronto se prepara para enfrentar a Roger Guerrero por dicho campeonato local, pero no sabe para cuándo se reagendará.

Hurtado se pregunta por su pasaje a Tokio

Han pasado 15 días desde la última vez que David Hurtado corrió sobre una pista atlética. Aunque ha hecho ejercicios de piernas, dice que ha perdido fuerza en sus músculos, lo cual le preocupa porque la marcha es su pasión y su profesión.

“En estas dos semanas sin marcha uno pierde del 35 al 40 % de la fuerza en las piernas. Si son dos semanas más, será casi el 100 %”, se lamentó. Y es que el marchista no tiene un espacio apropiado para entrenar en casa, así que ha tenido que conformarse con ejercicios a espacio reducido.

Aunque está de acuerdo con las medidas tomadas en el país para evitar la propagación del coronavirus, a Hurtado le preocupa su clasificación a los Juegos de Tokio, que fueron aplazados para el siguiente año.

Explicó que la marca para clasificar se debe poner de seis a doce meses antes del evento deportivo y, al ser pospuesta la cita olímpica, la duda de Hurtado es si esas marcas que ya estaban impuestas se reinician y los atletas que ya estaban inscritos en las Olimpiadas deben volver a buscar un cupo.

En cuarentena, lejos de la familia

La nadadora Samantha Arévalo está lejos de casa. Su cuarentena la cumple en Montpellier (Francia). Ante la veloz propagación del coronavirus, decidió no regresar a Ecuador para evitar un posible contagio a su familia.

Así lo explicó su hermano Víctor Hugo, quien manifestó que la deportista, de 25 años, estaba realizando su preparación en búsqueda de un cupo para los Juegos de Tokio, que serían sus terceras Olimpiadas.

“Allá ella combina su tiempo entre acondicionamiento físico y el arreglo de su departamento. No tiene una piscina para entrenar natación, pero hace otro tipo de ejercicios para los músculos”. Sin embargo, la misma nadadora, oriunda de Morona Santiago, indicó que no es lo mismo ese tipo de acondicionamiento que practicar dentro del agua.

No tiene fecha de regreso a Ecuador, pero mientras eso ocurre, Arévalo continúa con su aislamiento voluntario desde que el Gobierno francés dictó medidas de seguridad frente a la pandemia del coronavirus. “Todo esto lo ha hecho por su bien y el de su familia”, dijo Víctor Hugo.