La experiencia se traslada en la marcha nacional

Ambos están en Tokio, desempeñándose en lo que mejor hacen a nivel deportivo, todo relacionado con la marcha. Se trata de Andrés Chocho y Glenda Morejón, ecuatorianos que son figuras internacionales de esta actividad. Ellos dejan en alto el nombre del país, de manera individual y como equipo.

Es que Chocho, experimentado deportista de 37 años, también cumple las funciones de entrenador de Glenda. El andarín cuencano le traslada a la marchista de 21 años toda su experiencia, con la finalidad de que la competidora nacida en Ibarra pula su técnica y siga mejorando su destreza sobre el asfalto.

Chocho ha implementado cambios en el trabajo que venía realizando Morejón, para explotar más sus aptitudes. Y recalca que pese a ser todavía un atleta activo, esto no le genera inconvenientes para estar al frente del trabajo de su pupila, que pisa fuerte dentro y fuera de las fronteras.

“En Ecuador es algo nuevo. Glenda tiene un potencial increíble. Le había seguido en sus competencias juveniles, sus marcas, hasta que llegó el Mundial de marcha y todo se derrumbó. Llevo trabajando un año con ella. Reestructuramos todo, empezamos de cero con un fortalecimiento básico”, comentó Andrés, quien ayer compitió por cuarta ocasión en unos Juegos Olímpicos. Lo hizo en los 50 kilómetros, distancia que no estará en el cronograma de competencias de París 2024.

Chocho, que tiene como una de sus fortalezas la mentalidad, tiene una frase de cabecera: “En una competencia no voy solo a participar, busco siempre ganar. El deporte hace que me sienta vivo. Llegar a un evento, los nervios, esa experiencia es inigualable”. Y es esa mentalidad la que trata de instalar en la deportista, que fue campeona mundial sub-18 en el 2017.

Morejón cuenta que ha sabido absorber las enseñanzas de Chocho en el proceso de preparación para la cita deportiva en suelo japonés. Esto, por el calor que impera en esta época del año en Sapporo, donde han sido claves los consejos de un atleta con gran experiencia en las justas olímpicas.

También destacó su madurez, fruto de “perseverar y levantarme a pesar de las caídas. Ser fuerte y valiente”.

Es así como este equipo formado por Morejón y Chocho ya dio un gran paso en unos Juegos Olímpicos, los primeros en la naciente trayectoria de la marchista nacional, con los que sin duda enriquecerá sus conocimientos en una disciplina que hace 25 años le dio la primera medalla de oro a Ecuador en una gesta ecuménica, con el gran Jefferson Pérez