Imane Khelif: la polémica alrededor de la boxeadora
La deportista argelina, Imane Khelif, cuenta con la certificación del COI para participar en las olimpiadas
En medio del revuelo y los rumores sobre el sexo biológico de la boxeadora argelina Imane Khelif, su contendora Angela Carini se disculpó el 2 de agosto por su comportamiento, tras abandonar la pelea entre ambas, en el marco de los Juegos Olímpicos París 2024.
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Leer másLa reacción de Carini y la ola de desinformación que se desató después generó varios ataques en contra de Khelif, por lo que la italiana ofreció disculpas.
“Si el COI (Comité Olímpico Internacional) ha dicho que puede luchar, respeto esa decisión”, dijo, y ofreció disculpas por no haberle dado la mano al final del encuentro. “En realidad quiero pedirle disculpas a ella y a todo el mundo. Estaba enojada porque mis olimpiadas se habían esfumado”, y agregó que no fue su intención.
Pero su próxima contrincante, la húngara Luca Hamori, ha tenido una actitud distinta. De acuerdo con diario Clarín, la boxeadora declaró: “Me tiene sin cuidado la historia de la prensa o las redes sociales. Si ella o él es hombre, será una noticia más grande para mí si gano. Será una gran pelea y espero ganar. No puedo esperar.
¿Quién es Imane Khelif?
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Leer másTiene 25 años, consiguió su cupo para representar a su país, Argelia, en las olimpiadas de 2024, pero entrenarse para la competencia no ha sido su única lucha.
Actualmente, el nombre de Imane Khelif aparece en incontables titulares de medios de comunicación por una polémica porque el año pasado, la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) la descalificara de un campeonato en India por, supuestamente, “no cumplir con los criterios de elegibilidad”.
El revuelo en redes, a partir del desconocimiento, los rumores y los prejuicios se desató este año porque Khelif, nacida en 199, en Tiaret, ganó su primera pelea en los Juegos Olímpicos porque su contrincante, la italiana Angela Carini decidió retirarse luego de recibir un golpe de su contendora.
De acuerdo con la BBC, los comentarios sobre la situación de Khelif partieron de insinuaciones de Umar Kemlev, presidente de la IBA, quien se habría referido a su caso y al de la taiwanesa Lin Yu-ting bajo el argumento de que no tendrían cromosomas XX sino XY, lo que marcaría diferencia entre sexo femenino y masculino, pero las aseveraciones no han sido probadas.
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Leer másA Yu-ting, incluso, le quitaron la medalla de bronce del mundial de Nueva Delhi luego de una “prueba bioquímica”. En ambos casos, supuestamente, habría una ventaja de ambas sobre sus contrincantes.
La IBA dijo que las boxeadoras “no se sometieron a un examen de testosterona, sino a una prueba independiente y reconocida, cuyos detalles se mantienen confidenciales”. Por ello, los detalles sobre qué tipo de prueba se hizo y sus resultados no se han difundido.
Los rumores señalaban que Khelif era intersexual. Sin embargo, eso no ha sido confirmado por ninguno de los involucrados en la polémica. La versión más extendida, a pesar de la confidencialidad de los exámenes de la deportista, es que podría tratarse de una mujer biológica con una condición endocrina denominada hiperandrogenismo.
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Leer másLa argelina lucha ahora contra esta ola de desinformación, para seguir con su carrera deportiva, por la que pelea desde niña, pues en sus inicios, su padre se resistía a que compitiese pues consideraba que el box no era un deporte para niñas. Ahora sus progenitores son su mayor apoyo.
La decisión de la IBA no pesa en las olimpiadas, pues el Comité Olímpico Internacional (COI) no la avala desde 2019.
Sobre la situación de Khelif se ha escrito mucho, pero de la poca información oficial sobre el caso hay puntos importantes: la deportista nació, creció y es mujer; el COI ha ratificado que todos los participantes de los Juegos Olímpicos, incluidas las boxeadoras están dentro de las normas de elegibilidad e inscripción y se han cumplido los procedimientos para certificar la normativa médica vigente desde los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro de 2016.
Khelif es mujer cisgénero y lo único que señaló el COI al respecto es que en su caso, los niveles de testosterona son altos. Sin embargo, Mark Adams, vocero del comité, rechaza las aseveraciones de que ella sería transgénero.
Se ratifica en que es falso y agrega que ella y otras deportistas han competido por años en boxeo, ganando y perdiendo encuentros como es usual, incluso en las olimpiadas de Tokio 2020, donde la argelina no alcanzó medalla. Además, en Argelia conceptos como la transexualidad son blanco de críticas, represión y hasta castigo.
En una rueda de prensa, Adams repitió este 2 de agosto que no es un caso de transexualidad. “La testosterona no es una prueba perfecta. Muchas mujeres pueden tener niveles elevados de testosterona, que está en lo que se llamaría ‘niveles masculinos’ y aún así ser mujeres y competir como mujeres”.
Ella, sin embargo, lleva años de trayectoria, que incluyen puestos discretos en las competencias hasta que en 2022 llegó a una final en el Mundial de Boxeo IBA de mujeres, en donde quedó vicecampeona.
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