Independiente del Valle alzó su primer trofeo
Los rayados se meten en la selecta galería de monarcas nacionales, tras empatar frente a Emelec en el estadio Capwell
Independiente Del Valle ganó su primera estrella de campeón en el fútbol ecuatoriano y no era para menos la celebración que tuvieron en el estadio George Capwell. 4-2 quedó el global a favor de los rayados, tras empatar 1-1 en la casa de los azules.
Tras el pitazo final en el partido de vuelta por la final de la LigaPro, los dirigidos por el director técnico Renato Paiva explotaron de la emoción y empezaron a correr por toda la cancha. Las lágrimas de emoción, los abrazos y gritos de euforia tampoco faltaron. Incluso, algunos se tiraron al húmedo césped por la intensa lluvia para llorar de alegría.
Cristian Pellerano, quien fue una de las figuras y pilar fundamental del equipo en esta temporada, fue uno de los primeros en recibir las felicitaciones de sus compañeros. Lo rodearon, lo abrazaron y hasta lo besaron. Lo mimaron como a un bebé, algo que contrasta con sus 39 años. Y el goleador del equipo con 26 tantos, Jonatan Bauman, no se quedó atrás. Al término del partido saltó de la banca de suplentes y se abrazó con Mateo Carabajal y Lorenzo Faravelli.
Yo siempre dije cuando llegué que no era un sueño, era un objetivo para un gran equipo que ha hecho un excelente trabajo.
Pero para lograr el cetro, los rayados tuvieron un luchado partido, bajo un intensa lluvia que hizo que el comienzo de la segunda parte se detenga por 54 minutos hasta el juez árbitro Augusto Aragón ordenó que se vuelva a jugar, pese a que en varios sector la pelota se estancaba.
El Bombillo fue una tromba desde el incio del compromiso, donde la enjundia era su principal argumento por el estado de la cancha, sin embargo, mientras Emelec hacía el gasto, el tanto inicial fue para Independiente del Valle. Este llegó a través de una jugada confusa en el área en la que Richard Schunke aprovechó un rebote y la mandó a la red, cuando se jugaban siete minutos.
Independiente es un justo ganador. Han sido los mejores equipos del año los que llegaron a la final. Sabíamos que era difícil, pero lo intentamos.
Fue un golpe que afectó en el marcador, pero no en el ánimo de los millonarios que tuvieron una ocasión de oro para empatar a través de un penal ejecutado por Sebastián Rodríguez, pero el meta Moisés Ramírez desvió el esférico.
Ya en los adicionales llegó el tanto de la igualdad azul en el partido y que dejaba a dos la diferencia para ir a los penales y tres de ganar directamente. Fue Dixon Arroyo el que de cabeza reavivó la esperanza de los locales. La segunda parte fue muy física, con más garra y coraje que fútbol, algo que también mostró Independiente para estrenar su vitrina de títulos nacionales.
