Juegos Olímpicos: Lisseth Ayoví, de la decepción a la clasificación

Tokio 2020 fue el gran sueño de Lisseth Ayoví. La halterista ecuatoriana, poseedora de varios récords panamericanos y sudamericanos en la categoría más pesada (+81 kg), entró en ese entonces al ranking olímpico como una de las 10 mejores del mundo al final del proceso de clasificación; sin embargo, no asistió a los Juegos.

Pese a cumplir con todos los requisitos de calificación, su boleto dependía del reglamento internacional que solo permite que cada país lleve máximo cuatro deportistas de una misma rama. Fue así que Lisseth perdió su cuota olímpica frente a Neisi Dajomes, que terminó siendo campeona; Tamara Salazar, plata olímpica; Angie Palacios, diploma olímpico; y Alexandra Escobar, cuyas marcas pintaban para medalla, pero en su participación se fue en blanco.

“Terminaron decidiéndose por mis compañeras, porque ellas tenían mejores posibilidades”, recuerda aún Lisseth. “Fue duro la verdad, ya pensaba en retirarme, en dejar todo ahí, pero me dieron consejos; me hablaron de que todo pasa por algo. De ahí que en este nuevo ciclo vine buscando la clasificación y gracias a Dios se dio”.

Hoy, la vida le dio una nueva revancha; en el ciclo olímpico actual Ayoví alcanzó logros mucho más grandes. Además de conseguir los títulos suramericanos y panamericanos, Lisseth se subió al podio del Campeonato Mundial de 2023 en Riyadh, Arabia Saudita, donde conquistó tres preseas de bronce.

“En el ranking estoy sexta, y hasta ahora mis mejores marcas son las que hice en el Mundial con 121 kg en arranque y 155 kg en envión”, reseña, contando que esto le dio la clasificación a los Juegos Olímpicos París 2024 en la división +81 kg. “No me imaginaba alcanzar el tercer lugar, pero creo que cuando uno tiene constancia de los entrenamientos, todo se da”.

En los Juegos Panamericanos Santiago 2023, la pesista de 25 años estuvo a un kilogramo de la medalla de oro contra la estadounidense Mary Theisen, mientras que en el campeonato panamericano 2024 conquistó tres preseas de oro, pero en su último intento, con el afán de mejorar su marca, sufrió un accidente.

“Estaba bien preparada… Son cosas de la vida, lastimosamente se me resbalaron los zapatos; como yo desplazo mucho entonces se juntaron. A pesar de las tres medallas de oro, en el último movimiento quería mejorar mi marca personal, por eso fue, pero gracias a Dios ya estamos bien, estamos recuperándonos para Juegos Olímpicos”, dice convencida. 

Por todo este contexto, París 2024 es un gran desafío para Ayoví; una revancha que la tiene expectante a conseguir nuevos logros. “A los Juegos Olímpicos no va cualquiera”, apostilla dejando abierta la certeza de que peleará esa medalla, sus resultados la avalan.

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