¿Por qué lloró Jhonny Quiñónez en el partido de Independiente de Avelleneda?
El jugador no ha tenido un partido completo en el torneo argentino
El mundo presenció la conmovedora imagen del ecuatoriano Jhonny Quiñónez, jugador de Independiente de Avellaneda, llorando al ser sustituido en el partido contra Argentinos Juniors. Sus lágrimas no fueron en vano, ya que al final el entrenador Julio Vaccari tomó una decisión que sorprendió a todos.
Las lágrimas de Quiñónez fueron porque Vaccari lo hizo ingresar a los 11 minutos para reemplazar a Federico Vega, pero a los 59 minutos, Quiñónez volvió al banco tras ser cambiado. Apenas 48 minutos en el campo, y cuando salió, sus lágrimas caían sobre el césped; su imagen en vídeo se volvió viral en pocos segundos.
Lloraba en el banco de suplentes
Jhonny Quiñónez 🇪🇨 había ingresado recién al minuto 11 del primer tiempo, por una lesión de su compañero. Sin embargo, su entrenador decidió sacarlo al minuto 59.
— Andrés Illingworth (@aillingworth96) September 22, 2024
No pudo contener las lágrimas el ecuatoriano. pic.twitter.com/IglQ7uD7Fw
Danny Luna: “Barcelona es historia; pensamos en Aucas”
Leer másDesde que llegó a Independiente de Avellaneda, el exAucas no ha tenido un partido completo. El encuentro en el que lloró, en el que jugó 48 minutos, marcaba su regreso a las canchas luego de no ser tomado en cuenta durante siete partidos: seis de la Liga Argentina y uno de la Copa Argentina. El ecuatoriano apenas ha estado presente en tres partidos del torneo principal.
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El entrenador le lanza flores al final
Luego de que Quiñónez llorara, el entrenador Julio Vaccari explicó el cambio que hizo, dirigiéndose a sus compañeros: "Jhonny es el mejor volante mixto que tengo y el que mejor cambio de orientación tiene. Le pedí disculpas a él delante del grupo porque fue algo que yo hice. En el partido pasado puse un futbolista y lo saqué; si yo considero que el equipo necesita algo en un momento determinado, diferente a lo que había hecho o lo que pensaba, lo haré".
Ver llorar a un jugador al salir del campo es poco común; la mayoría se molesta y se desquita pateando balones o lo que se les cruce en el camino.
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