Miler Bolaños y Ariel Nahuelpán, una mezcla explosiva
Sus antecedentes explican el motivo de su pelea en Xolos. El argentino ya se fue del equipo, el ecuatoriano está en espera
Acostumbrados a ser el centro de la atención, Miler Bolaños y Ariel Nahuelpán habían conformado una buena fórmula de ataque en los Xolos de Tijuana. Sin embargo, muchos consideraban que esa mezcla de agua y aceite ponía en peligro la estabilidad del grupo, como finalmente sucedió.
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Leer másMedios mexicanos informan de un acto de indisciplina que ambos jugadores habrían protagonizado el pasado 12 de agosto, luego de la derrota ante San Luis, en partido de la cuarta jornada de la LigaMX.
El historial de los protagonistas de la rencilla es amplio, dando así una dosis de credibilidad a las acusaciones.
En agosto de 2015 la directiva de los Tuzos de Pachuca confirmó que Nahuelpán agredió con un golpe de cabeza en la nariz a su compañero, el defensa Miguel Herrera.
En mayo de 2018 la dirigencia de Barcelona apeló en los tribunales deportivos una suspensión que pesaba sobre el ‘Loco’, luego de haberse agredido mutuamente con Bryan Cucco. Poco después, trascendió una pelea que el mismo delantero argentino habría tenido en camerino con dos de sus compañeros.
Adicionalmente, ese mismo mes protagonizó una pugna con Michael Arroyo en plena cancha del estadio Monumental por la ejecución de un tiro penalti, en la derrota 1-2 ante Boca Juniors, ya en el tercer minuto de adición.
NI EL TÉCNICO SE SALVÓ
Unas semanas antes, el exfutbolista Flavio Perlaza denunció que Nahuelpán tenía conflictos con el técnico Guillermo Almada, situación que se hizo notoria cuando el uruguayo lo sustituyó en un encuentro y el argentino lo recriminó por su decisión.
En octubre de 2007, Miler Bolaños, entonces jugador de Barcelona, dio positivo de cocaína en un control doping.
Cuando pasó a la otra orilla del Astillero, fueron muchas las ocasiones en las que se habló de su indisciplina, comportamiento que continuó en el Gremio de Brasil, donde en 2017 el técnico Renato Gaucho lo cuestionó por “su comportamiento no apropiado”, lo que finalmente le costó su salida.
Rodrigo Paz, dirigente de Liga de Quito, reconoció en su momento que Bolaños es “un gran futbolista”, pero cuando militó en ese elenco fue necesario “llamar a su mamá y a un psicólogo pero no cambiaba”.
Con este tipo de antecedentes, un conflicto entre los dos era cuestión de tiempo.