Omar Quintana deja un vacío difícil de llenar
El exbasquetbolista y otrora presidente de Emelec falleció a los 76 años. Fue impulsor de varios deportes en Ecuador.
El deporte ecuatoriano perdió a uno de sus personajes más insignes con el fallecimiento de Omar Quintana Baquerizo, quien dejó de existir a los 76 años. Fútbol, baloncesto, béisbol, box, natación... cualquiera sea la disciplina, ahí estaba él para impartir sus conocimientos.
Es que el también exitoso empresario, nacido en Quito, pero cuya vida la desarrolló en Guayaquil, fue parte activa del acontecer deportivo nacional como actor principal en las canchas y desde los escritorios como directivo. Es en esta última faceta como lo recuerda el exdefensa de Emelec Juan Triviño, quien apenado por su partida, cuenta que siempre cumplía sus promesas, además de aplicar con firmeza la disciplina.
“Es una tristeza lo que ha sucedido con don Omar. Se puede decir muchas cosas de él, pero el tiempo que estuve con él siempre nos cumplió y era un tipo que generaba respeto. Recuerdo que cuando concentrábamos en Samanes llegaba en plena madrugada a ver si estábamos completos, revisar cuarto por cuarto. Vivimos algunas anécdotas juntos”, manifestó el otrora elemento azul, que fue bicampeón ecuatoriano de fútbol con Quintana como dirigente.
De trato amable y sonriente la mayoría del tiempo, también se irritaba con facilidad cuando consideraba que se tomaban decisiones nada saludables para el deporte. Esto lo hizo ser partícipe en más de una polémica, pero siempre dispuesto a dialogar para encontrar humo blanco con personas que, pese a tener conceptos diferentes a él, podían aportar con ideas en beneficio del mismo.
Era un líder. Cuando perdimos la final de Merconorte nos ayudó a levantarnos y luego fuimos campeones nacionales.
El Caballero del Deporte, como se lo conocía, está en la historia del baloncesto ecuatoriano como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, no en vano fue campeón del Guayas y seleccionado nacional, además jugó en el equipo español Estudiantes, en 1963, y en 1969 fue subcampeón sudamericano de clubes defendiendo la casaquilla de Liga Deportiva Estudiantil.
Quintana, fundador del Club Diana Quintana, donde se forman nuevos talentos de la natación, también se puso la camiseta de Emelec en el básquet, siendo uno de los elementos más emblemáticos de la escuadra azul, con el que consiguió varios cetros.
Enrique Segura, expresidente de la Federación Ecuatoriana de Baloncesto, lo recuerda como una persona muy solidaria y dispuesto a ayudar al que lo necesite. “Estoy muy apenado, más allá de ser un gran directivo de varios deportes, además del baloncesto, era una excelente persona, solidaria al cien por ciento, preocupado siempre por el bienestar de los deportistas y su formación como seres humanos”, expresó el otrora dirigente.
Con el Bombillo, Quintana consiguió también trofeos en box, béisbol y fútbol, en esta última disciplina logró tres campeonatos nacionales en 1979, 2001 y 2002. Parte de los dos últimos títulos fue Carlos Alberto Juárez, exdelantero millonario que lo recuerda temperamental, pero siempre presto a hablar para solucionar los problemas, además de llamarlo amigo. “Al principio no podíamos hablar dos palabras porque terminábamos siempre discutiendo, ya con el pasar de los años nos hicimos amigos, ya le decía ‘bueno Omar, tiene razón’. Me decía que era el bravo, él era un loco lindo”, comenta con nostalgia el Cuqui haciendo referencia al extitular de Emelec.
Es una gran pérdida la que sufre el deporte con el fallecimiento de don Omar, un hombre muy solidario que pensaba en los demás.
Quintana, quien incursionó en política y fue presidente del Congreso Nacional en el 2005, también destacó como dirigente de 9 de Octubre, club al que llevó a dos Copa Libertadores.
Es así como en medio de esta pandemia del coronavirus, el deporte pierde a una persona que brilló dentro y fuera de las canchas, dejando un vacío difícil de llenar.
