Rugby inclusivo con Jaguares
Desde 2018, este club abrió el camino a un grupo de chicos con capacidades diferentes en este deporte, con el que han representado al país internacionalmente
Las expresiones en el rostro de Érika González, quien tiene el 52 % de discapacidad intelectual, la delatan. Su hiperactividad, felicidad y la sonrisa son las pruebas de que en los entrenamientos del equipo guayaquileño de rugby Jaguares, en el que también participan personas con capacidades diferentes, se siente “cómoda”.
El rugby se afianza en el Guayas
Leer másA pesar de que llega con 15 minutos de anticipación a la práctica, que este día inicia a las 19:30, y ya viste su ropa deportiva, la joven de 26 años arriba apresurada y jalando a su mamá, María del Carmen González, quien siempre la acompaña a las sesiones en Jaguares. Pensaba que estaba llegando tarde.
Sin embargo, al ingresar a la cancha de fútbol del parque de La Ferroviaria, en el suroeste de Guayaquil, su semblante cambia. Deja tirada su mochila, que recoge su madre, mientras le dice: “ten cuidado, mi amor”. Érika corre hacia el centro del campo y, muy atenta, saluda a cada uno de los cerca de 10 compañeros que ya están en el lugar.
En ese momento, ya está en su ‘papayal’. Empieza a realizar sus estiramientos previos al calentamiento, pero ese no es impedimento para dejar de conversar y bromear con sus amigos. No para de reír ni de hablar con todos. Sin embargo, a las 19:30, cuando empieza el entrenamiento, cambia su ‘chip mental’, se calla y su atención la dirige a los trabajos.
En el equipo Jaguares, los jugadores de su elenco principal, que tienen todas sus facultades completas, entrenan junto con personas con discapacidad para promover la competencia.
Para Érika, quien juega como defensa, no existe la palabra pereza y tampoco le gusta hacer mal las cosas. Es por eso que le mete intensidad, alma y corazón. Corre sin parar por toda la cancha y taclea sin miedo a lastimarse, sin importar que su rival le doble en estatura y corpulencia. Ella mide 1,60 metros y es delgada, pero igual va con todo.
Ese talento la llevó a participar en el Torneo Internacional de Rugby de Habilidades Mixtas, que se disputó entre el 5 y 10 de junio en Irlanda. En esta competencia los equipos son conformados por personas con y sin discapacidad física o cognitiva diagnosticada. Jaguares fue invitado para representar a Ecuador y llevó un equipo masculino y femenino.
El rugby les lleva del barrio al principado
Leer más“En 2019 lo empecé a entrenar. Tenía miedo, pero mis amigos me ayudaron para que me adapte. Ahora, hasta tiro a mis rivales. Amo este deporte, porque ya hasta jugué un Mundial. Con esta disciplina dejamos en alto el nombre del país”, dice sobre el torneo en el que fueron subcampeonas. En la final perdieron con España.
María del Carmen González revela que Érika siempre fue apasionada a los deportes, sobre todo a la natación, disciplina en la que tenía como objetivo participar en torneos, pero no pudo alcanzarlo y decidió dejar de entrenarla.
Aquello la deprimió y, por esa razón, tuvo que estar con psicólogo. Pero desde que conoció el rugby “su vida cambió radicalmente”.
“Este deporte le ha ayudado a cambiar su forma de ver y vivir la vida. En ella noté un despertar en su alegría, su interés por hacer cosas diferentes y su autoestima subió. Cada vez que entrena se siente más aceptada, no se siente incómoda como le sucedió en antiguas disciplinas. Al estar con chicos especiales no socializaba, pero acá al ser integrada con personas que no tienen discapacidad se siente diferente, se siente valorada”, dice emocionada.
María del Carmen acompañó a su hija al Mundial de Rugby. “Fue impresionante. Vi que allá son muy importantes estos torneos. Nos sentíamos famosos porque las personas locales nos tomaban fotos y nos daban la bienvenida. Los estadios siempre estuvieron llenos y lo que más me impactó fue que en el equipo de Irlanda jugaban los padres con sus hijos”.
Jaguares, para que sus jugadores con discapacidad conozcan el roce de la competencia, realiza partidos amistosos. No es lo mismo, pero eso les sirvió para dar pelea en el Torneo Internacional de Rugby de Habilidad Mixta. Y esperan conseguir mucho más en el futuro.