Violencia: Ni LigaPro ni FEF se han interesado en hincha que perdió el ojo
El aficionado denuncia además una presunta persecución de la Policía
La vida de Edison Pilataxi, de 35 años, se transformó por completo, luego de perder su ojo derecho durante un partido de la LigaPro en Cuenca. Aunque el caso se investiga ya en los tribunales de la provincia del Azuay, la autoridades deportivas nacionales no se han pronunciado al respecto, hasta el cierre de esta edición.
En diálogo con EXPRESO, la víctima relató que la hinchada celebró la anotación de Gabriel Villamar, por lo que algunos jóvenes de la General Norte decidieron subirse a las mallas de seguridad, pero él no, él se quedó parado en las gradas.
La acción llevó a la fuerza pública a disparar municiones de goma a ‘mansalva’, por lo que no solo uno, sino cuatro perdigones impactaron en diferentes partes el cuerpo de Pilataxi: cabeza, cuello, brazo y ojo, con el resultado que ya se conoce.
“Cuando sentí el impacto solo me senté porque me sentí mareado. En ese momento supe que algo pasó con mi ojo y cuando estuve en la ambulancia los paramédicos se dieron cuenta que era el perdigón que estaba incrustado”, narró.
Tras este hecho, la víctima fue sometida a una cirugía en el Hospital Vicente Corral Moscoso para extraer los restos de su glóbulo ocular que quedó destruido en el fondo de su cavidad. También deberá asistir a controles médicos por seis meses para evitar que se desarrolle una infección.
“Dispararon a quema ropa. Cuando me di la vuelta escuchando los disparos sentí el impacto. Fueron cuatro perdigones en un solo instante. Cómo disparar, a qué, a matar”, se preguntó.
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Persecución y temor a represalias
El hermano de la víctima, Roberto, aseguró que temen por la seguridad de su familia ya que sienten que han sufrido persecución por parte de los efectivos policiales. “Mientras mi hermano estaba en el hospital, los policías querían llevarse el perdigón que le sacaron del ojo. También llegaron varias veces para interrogarlo, incluso en horas de la madrugada”, comentó.
Con este antecedente, la familia Polataxi pidió al gobernador del Azuay, Santiago Malo, que se garantice la seguridad de todos. Además, el caso se investiga en la Fiscalía Provincial del Azuay.
Si bien la Policía y Liga de Quito emitieron comunicados (Pilataxi rechazó el de la institución policial), las autoridades y dirigentes del fútbol ecuatoriano han mantenido silencio sobre lo sucedido en el Estadio Alejandro Serrano Aguilar. Este medio consultó tanto a la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) como a la LigaPro si se emitirá algún pronunciamiento oficial de los hechos suscitados, pero no se obtuvo respuesta hasta el cierre de esta edición.
Finalmente el gobernador Santiago Malo dijo a EXPRESO que pese a los tres días que ha transcurrido del hecho aún no hay un informe policial completo, por lo que se comprometió a gestionar ayuda social para la víctima y su familia.
“No van a estar solos. He pedido que todas las carteras de estado se activen para brindar asistencia social. También pedí que la policía extienda un informe completo de los hechos”, sostuvo tajante.
El club Deportivo Cuenca también se pronunció sobre el incidente y en su comunicado señala “Este desafortunado incidente se dio a raíz de una acción sin ningún juicio de valor en un afán de mantener el control de la hinchada visitante”.
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