120 sacos de basura son recogidos a diario de un tramo de la Perimetral

A diario se encuentran desechos regados por toda la vía Perimetral, ruta que recorre desde el sur hasta el norte de Guayaquil. No obstante, uno de los tramos donde más se ha visto basura acumulada es desde el tercer puente de la isla Trinitaria hasta la avenida del Bombero. En esta zona se recoge diariamente 120 sacos por trabajadores de la Dirección de Aseo Cantonal, Mercados y Servicios Especiales (Dacmse).

De acuerdo con el Municipio de Guayaquil, 16 recolectores recorren este tramo de cinco kilómetros. Entre los residuos que más se observan están las botellas plásticas, cartones y fundas de snacks. Pero en general, se encuentra todo tipo de restos.

Según la ciudadanía, este tramo no es muy poblado, por esta razón les asombra la gran cantidad de basura evidenciada en la zona. El Cabildo atribuye este daño a los ciudadanos que arrojan desechos desde buses y vehículos particulares.

Relevancia ambiental de la zona

Además, explican que esta es una zona protegida debido a los manglares y las decenas de especies presentes. Situación que preocupa a los ambientalistas y a varios ciudadanos. “Está bien lo que hace el Municipio de limpiar a diario, pero si no ponen multas o hacen algún cambio, seguiremos igual y será todo en vano. Se necesitan más multas y control en esta zona, y evitar que el manglar se siga contaminando. Creo que lo que deberán hacer es colocar agentes que paren los vehículos y pongan multas altas a los infractores para que paren de una vez por todas con esto”, comenta el ciudadano Daniel Ojeda.

Asimismo, Karelys Gonzáles, quien transita por este punto para llegar a su trabajo, denuncia que ella ha visto como no solo son arrojados objetos pequeños como botellas plásticas. “He visto como la gente mientras están conduciendo lanza fundas repletas de basura en los puntos más abandonados de esta vía; es asqueroso e indignante. Hasta las llantas he visto que dejan. Hace una semana vi como dos sujetos en moto lanzaron una llanta y una funda pequeña al monte, todo lo hicieron sin bajarse o parar la moto”, relata.

Ismael Donoso, quien es voluntario en labores de recolección, comenta que todos estos objetos son peligrosos para las especies, que “pueden confundirlos con alimentos y terminan ingiriéndolo o dándoselos a sus crías, lo que resulta luego en su muerte”.

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