La Alborada, aterrada por extorsiones
Propietarios de negocios y de viviendas están alarmados por la circulación de volantes con pedidos de dinero por seguridad. Algunos optan por mudarse
De a poco, las amenazas y extorsiones por supuesta seguridad a negocios y viviendas, en una nueva modalidad delictiva conocida como ‘vacuna’, invaden a Guayaquil. Las intimidaciones han llegado hasta entidades educativas y profesores, como lo ha publicado EXPRESO, abonando al clima de inseguridad que se vive por las muertes violentas atribuidas al tráfico de drogas.
En Pascuales aumenta el temor a ser vecino de la extorsión
Leer másEsta vez, los residentes de la ciudadela Alborada denunciaron la aparición de panfletos en locales, a través de los cuales una supuesta organización delictiva exige el pago de hasta 500 dólares, a cambio de seguridad.
Los moradores temen por la vida de sus familias, mientras que los comerciantes sienten preocupación de que la delincuencia les quite lo poco que ganan al mes, con cobros de entre $ 100 y $ 500.
Alejandro y Miguel (como así decidieron identificarse por temor a ser víctimas) son dueños de locales comerciales en la cuarta y séptima etapa de la Alborada. Ambos tienen conocimiento de que en la quinta, cuarta y novena etapa de la ciudadela han llegado a repartir esas volantes con extorsiones.
Que vaina, con razón los últimos ataques han sido en la Alborada.#EfectoLasso #EstadoFallido pic.twitter.com/lsZTivMBbh
— Omar Idrovo (@omaridrovo) September 21, 2022
“Lo que gano no va a ahorros o algo por el estilo. Todo lo que consigo de dinero es dirigido a cuidar a mi familia, a subsistir; pero quieren quitarme gran parte de lo que he obtenido con trabajo duro... No me parece justo que unos rufianes, unos vividores, vengan y se lleven todo”, cuestiona Miguel, quien lleva años con un local de repuestos electrónicos y pide a la policía que les garantice seguridad, porque es la institución llamada a brindarla.
Los tentáculos de la extorsión llegan hasta los colegios de La Libertad
Leer másMás que el terror a ser víctima de esa delincuencia, a Alejandro lo consume el coraje que siente ante “la falta de coordinación por parte de la policía con la comunidad” y que los antisociales lleguen hasta su querido barrio.
Moradores de la quinta etapa señalan que hace ocho días ese tipo de ‘vacunas’ llegó a un negocio de venta de productos naturales. La situación obligó a sus dueños a cerrar las puertas del local y marcharse antes de que ocurra algo peor, comentan los residentes que conocen de la situación, aunque piden no ser identificados ni que se expongan sus rostros.
¿Qué están haciendo las autoridades para impedir que las ‘vacunas’ avancen y sigan ganando territorio, como lo ha ganado el microtráfico en las calles? ¿Cómo luchar contra estos enemigos internos que ahora tiene la ciudad?
Un equipo de este Diario acudió a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de la cuarta etapa de la Alborada, para conocer cuántas denuncias se han presentado hasta el momento con respecto a esas extorsiones, y qué acciones o medidas se están tomando frente a esta situación. En el sitio, los gendarmes indicaron que acudamos al Cuartel Modelo. Igualmente, se hizo la consulta al Comando de la Zona 8, pero hasta el cierre de esta edición no hubo ninguna respuesta.
Hoy enfrentamos al peor enemigo que puede enfrentar un país, que es el crimen organizado, los cárteles de narcotráfico... Ahora somos un infierno de violencia.
Con la captura de extorsionadores, requerimos de los perjudicados que coloquen las denuncias respectivas, que nos viabilicen con el delito de extorsión y poder vincularlos.
El general Paco Moncayo, exalcalde de Quito y exjefe de Estado Mayor del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, sostiene que las causas de lo que ahora vivimos son el levantamiento de la base militar de Manta y la presencia de una base de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en territorio nacional y su financiamiento en una campaña electoral.
“Hoy enfrentamos al peor enemigo que puede enfrentar un país, que es el crimen organizado, los cárteles de narcotráfico. De haber sido una isla de paz como fue el Ecuador, ahora somos un infierno de violencia”, compara, al considerar que ya no es tiempo de lamentarse, pero tampoco de equivocarse, en un tema de tanta importancia en el que no ve una política de seguridad clara.
Considera que hace falta unidad nacional, como la tuvo el país durante la guerra que enfrentó con Perú. “Hoy tenemos que ser un solo Ecuador, dejar las banderas politiqueras a un lado... Es el momento en que el poder nacional, en todas sus expresiones, se emplee con toda la fuerza para atacar a esta amenaza gravísima que está destruyendo nuestra paz, la paz de nuestros hogares; y lo que es peor, está destruyendo a nuestros jóvenes y niños”, menciona, durante una pausa en un conversatorio que tuvo en Guayaquil.
Una amenaza en la florestaEl general Víctor Zárate, comandante de la Zona 8 de la Policía, informó de la detención de tres personas denunciadas por presuntas extorsiones en La Floresta, en el sur de la ciudad. Los sujetos se dedicaban a pedir grandes sumas de dinero a cambio de supuesta protección.