Guayaquil: Un botadero de desechos hospitalarios genera temor
Moradores de la cooperativa Janeth Toral advierten de la presencia de supuestas mafias. En camiones llegan al sitio para arrojar los desperdicios
Peligro. Es lo que en silencio observan quienes transitan por la avenida 64 N-O de la cooperativa Janeth Toral, en el norte de Guayaquil, ante la presencia de un botadero que se ha formado con aparentes desechos hospitalarios.
El riesgo de enfermar por la basura regada cerca de sus casas es latente, así como el temor a revelar quiénes estarían detrás de eso. Un equipo de EXPRESO que visitó dos veces el lugar se percató del inusual basurero, donde habían arrojado agujas, jeringas, fundas y vías de sueros, batas desechables y hasta frascos de ceftriaxona, una inyección para tratar algunas infecciones provocadas por bacterias como la gonorrea o meningitis.
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Leer másQuienes transitaban por el sitio preferían no identificarse, pero tras cámaras indicaron que eso era provocado por “una mafia” y que si hablaban con nombre y apellido hasta los podían matar.
“Suelen pagar diez dólares a algunas personas de aquí para que bajen las fundas que traen en camiones”, mencionó uno de los moradores, que iba en moto y se detuvo a observar detenidamente lo que habían arrojado.
¿Qué peligro reviste para esa comunidad ese tipo de desechos al aire libre? Un estudio del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) señala que los residuos hospitalarios son aquellos desperdicios generados en los establecimientos de salud, en cualquier estado físico, que por sus características corrosivas, tóxicas, venenosas, reactivas, explosivas, inflamables, biológicas, infecciosas o irritantes representan un peligro para la salud humana, el equilibrio ecológico o el ambiente. Con esa definición se puede concluir el peligro que representa ese botadero, y que podría repercutir en la salud y hasta la vida de quienes habitan en la Janeth Toral.
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Leer másTanto el Municipio como el Ministerio de Ambiente corroboraron que las fundas rojas son utilizadas para basura peligrosa de hospitales. En el basurero se observaron bolsas de ese color que estaban llenas, pero se desconoce su contenido.
“Esto es considerado como una infracción muy grave que es sancionada. El control les corresponde a los ministerios de Salud y de Ambiente, pero el Municipio puede verificar la mala disposición de los desechos arrojados de manera clandestina”, explicó Gustavo Zúñiga, director de Aseo Cantonal del Cabildo porteño.
Por su parte, el Ministerio de Ambiente citó varias leyes y señaló que a ellos y al Ministerio de Salud les corresponde el control y seguimiento de la gestión externa de los residuos de los establecimientos de salud.
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Leer másEntonces, si se hacen los debidos operativos, ¿por qué existen botaderos ilegales? “Varios factores inciden en la inadecuada disposición de desechos, como por ejemplo la falta de conciencia ambiental, o desconocimiento del marco legal vigente”, indicó el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica a través de su dirección de Comunicación Social.
Lo que sí ratificó Ambiente es que de acuerdo con el Reglamento del Código Orgánico del Ambiente está prohibido disponer residuos peligrosos en áreas protegidas, en el dominio hídrico público, aguas marinas, playas, en las vías públicas, patios, predios, solares, quebradas o en cualquier lugar no autorizado. Incumplir esto se considera una infracción grave y por ello se pagan multas que pueden ir desde cinco salarios básicos unificados (2.000 dólares) hasta 75 salarios básicos unificados (30.000 dólares).
Aún se espera la respuesta del MSP. La entidad respondió que había recibido el requerimiento de este Diario y que enviaría sus observaciones, pero al cierre de esta edición no llegaron las contestaciones.
Con las explicaciones que dieron el Municipio y Ambiente quedó claro que esa basura hospitalaria no tiene por qué estar a un costado de la avenida 64 N-O de la cooperativa Janeth Toral.
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Leer másHay un peligro para quienes habitan cerca de allí. “Todo desecho peligroso que sale de un hospital debe ir directamente a una de las empresas que tienen los debidos permisos para manipular esta basura, para ser quemada”, explicó el epidemiólogo Mario Paredes.
Agregó que ese tipo de basura puede afectar la salud de quienes viven cerca. “La mayor parte de los componentes orgánicos son de tipo infeccioso cuando provienen de unidades hospitalarias”, resaltó el doctor. Y advirtió que algunas personas adictas a las drogas buscan medicinas, porque tienen adicciones múltiples. No saben lo que es, pero igual se lo toman si la encuentran en un basurero. O a veces cogen las agujas y jeringas para reusarlas.
Sin duda que esto es como una bomba de tiempo, porque también hay afectación al medio ambiente. La disposición no controlada en lugares no autorizados, lo que se llama botadero salvaje, generaría dos tipos de problemas al entorno: uno respecto al suelo por la cantidad de elementos químicos y biológicos allí dispersos en contacto directo, pero también por la contaminación del agua, detalló el ecologista José Delgado Mendoza.
Lo que más inquieta a Delgado es la afectación al agua. Las lluvias están por llegar y con estas el material contaminante ingresaría al suelo como lixiviados (jugos de esas sustancias), contaminando la capa freática (la primera capa de agua subterránea), llegando a través del suelo hasta arroyos y ríos, de los cuales se extrae el agua para actividades domésticas.
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Leer más¿Qué cantidad de basura de hospitales hay allí y desde cuándo? Es lo que deberán responder las autoridades luego de la investigación que realicen y sancionar a los responsables. Lo que está claro es que quienes hacen esto tienen dinero. La segunda vez que el equipo de EXPRESO acudió al sitio había huellas de que una máquina pesada había intentado enterrar los desechos hospitalarios, sin lograrlo.
Y como indicaron personas que pasaron por allí, “aquí hay una mafia”. Mientras se hacían nuevas fotos, circularon hombres en dos motos que con sus gestos instaron al equipo periodístico a retirarse del lugar.
Nadie sabe a qué nivel de contacto infeccioso estuvieron esos materiales, por lo tanto hay riesgo para las personas y contaminación para el medio ambiente y agua.
La basura peligrosa de hospitales se entrega a empresas que tienen permisos de las autoridades, que la queman. Botarla en cualquier lugar puede afectar la salud de quien esté cerca.