Buses escolares: guía para escoger el mejor servicio
Conductores recomiendan que los expresos cuenten con cámaras de seguridad. Buscan conocer los antecedentes del chofer
El regreso a clases también incrementa la oferta de buses escolares que transitan de lunes a viernes por todo el Puerto Principal. Todos los años los padres de familia solicitan este servicio pues el horario de estudio no les permite llevar o recoger a sus hijos en las distintas instituciones educativas, privadas y públicas de la ciudad.
Atención médica: estas son las opciones en Guayaquil
Leer másEste año conductores que prestan el servicio, aseguran a EXPRESO, que la tarifa ha aumentado de $1 a $2, debido a la elevación del precio de la gasolina. Asimismo, aconsejan que los representantes se fijen sí el vehículo está autorizado y posea elementos de seguridad como cámaras dentro de los buses para transitar con mayor protección en Guayaquil.
(Te puede interesar: México: La suspensión comercial con Ecuador se dio antes del conflicto diplomático )
David Chaguay de 30 años, conductor de transporte escolar de la compañía El Mianki, comparte a este Diario el trabajo que se proyecta a realizar este año lectivo, y también da recomendaciones para que los padres sepan escoger el mejor transporte para sus hijos. “Por lo general las rutas que ofrecemos son de puerta a puerta para colegios, universidades, y empresas de forma lineal. Los precios varían, según la distancia de punto a punto, pero se toma en cuenta la hora y el tiempo recorrido para el contrato. La recomendación que le doy al ciudadano común es que busque una compañía que implemente normas y protocolos de seguimiento y seguridad en el transporte escolar”, señala.
Según un artículo publicado por este medio, en 2023 circulaban 2.483 expresos escolares, de los cuales 1.513 unidades tenían cámaras de seguridad instaladas. En cada uno había cuatro dispositivos: dos adentro para enfocar a los alumnos y dos afuera para monitorear a su alrededor. Además, cerca del conductor había un botón de pánico que al activarse emitía una alarma que aparece de inmediato en las pantallas del sistema ECU-911 y en la sala de monitoreo de la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM).
Katty Torres de 47 años lleva trabajando como conductora de un expreso escolar e institucional por más de 20 años. Actualmente, trabaja en la cooperativa Cootra Estur Ltda. que funciona por medio de contratos con el cliente desde la unidad educativa a la cual presta servicios.
Montepío: ¿A quiénes favorece y cuándo acceder al beneficio?
Leer más(Sigue leyendo: Caso Encuentro: Guillermo, Danilo y César, nombres que aparecen en nuevos archivos )
Torres, quien trabaja para el colegia Lemas, en Mucho Lote 1, y tiene asignada la ruta de vía Daule, ingresando a urbanizaciones como Tottori, Colinas del Sol, Loma Vista, Mi Lote, Villa Bonita, entre otras, recomienda a los guayaquileños, utilizar expresos autorizados con permisos de operación al día, y que cumplan lo establecido con la ley.
“Asimismo, sí el colegio se hace cargo de los contratos mucho mejor. Los precios en mi caso los pone la unidad educativa, y cada año varían dependiendo la distancia a la que se encuentra el estudiante. Generalmente, ya hay costos asignados por cada sector”, alega.
Andrés Vinueza, de 46 años, conductor de servicios escolares por más de 10 años en colegios particulares y públicos de la ciudad también alega que es importante conocer el historial del conductor. “Hoy en día no podemos permitir que nuestros hijos vayan con personas desconocidas, es importante que los choferes de buses escolares presenten sus credenciales, conocer sino tienen antecedentes penales. Tener varios contactos para poder llamar si existe algún inconveniente y reportarlo”.
Mercados de Guayaquil: ¿Cómo moverse por la amplia red?
Leer más(Además: Consulta popular: preguntas de referéndum tienen una ajustada aprobación )
Las condiciones del vehículo también influyen a la hora de elegir el transporte para los estudiantes y los padres de familias. “Es necesario que cuente con aire acondicionado sobre todo por el clima de Guayaquil”, alega Vinueza.
EXPRESO INFORMAL
Román Apolo tiene 27 años de edad, y conduce un carro particular, que ha servido como taxi informal y transporte escolar desde hace dos años. Por la inseguridad se quedó solo con el trabajo de chofer escolar, debido al riesgo a ser víctima de la delincuencia que azota al país. Ápolo asegura a EXPRESO que “hay que buscar formas de ganarse la vida”.
Aire acondicionado: portátil o split, ¿cuál es la mejor compra?
Leer más“Desde hace dos años todo el día paso haciendo expreso. Comienzo a las 6:00 am. trasladando a un profesor a su colegio, luego a tres niños a una escuela particular en el norte de la ciudad, y después a una trabajadora universitaria. El trabajo suele ser cansado, pero es mucho más seguro”, sostiene.
Andrés S. de 32 años también trabaja como expreso informal en dos colegios de la ciudad. Andrés comparte a este Diario, que el prestar sus servicios profesionales le ha permitido pagar su vehículo personal. “Por falta de trabajo tuve que buscar ingeniarme ofrecer mis servicios como expreso”.
Para leer sin límites, SUSCRÍBETE A EXPRESO