En 751 expresos escolares ya se han instalado cámaras de seguridad
Desde el martes 17 de enero se colocará estos equipos en los buses de transporte urbano y de la Metrovía
Un total de 751 expresos escolares y de transporte de personal ya circulan con las cuatro cámaras de seguridad y botón de pánico del sistema de monitoreo. Estas unidades llevan una etiqueta para advertir que están siendo vigiladas permanentemente por la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM).
Listos los equipos que se colocarán en la transportación para ofrecer seguridad
Leer másJaime Sempértegui, director de Gestión Integrada de Tránsito y Transporte de la ATM, explicó que “al momento se han registrado 20 alertas como riñas, siniestros de tránsito y otros dos incidentes más graves, uno de ellos fue el hurto y posterior recuperación de un expreso robado en Guayaquil. Mientras que en un taxi se logró dar seguimiento y rescate de un secuestro exprés”.
Actualmente el 27 %, de un total de 2.700 unidades de expreso son monitoreadas.
Desde el Centro de Control Integrado de Tránsito y Transporte (Ccitt) se coordina con la Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil (CSCG) y las entidades de socorro las atenciones a las emergencias que ocurren en el cantón.
A partir del martes 17 de enero empezará la instalación de las cámaras de vigilancia, internas y externas en los buses de transporte urbano y de la Metrovía.
Se instalarán un total de 24.000 cámaras con botón de pánico en 6.000 vehículos.
Expresos escolares, buses y taxis tendrán cámaras y botón de pánico
Leer másEstos dispositivos visualizan la parte frontal del vehículo, otra la parte posterior y dos interiores que abarcan las filas de asientos.
Adicionalmente los conductores beneficiados reciben capacitación sobre la operación del sistema, el cual se entrega sin costo para el transportista.
Pedro Rodríguez, conductor de un expreso escolar, mencionó que ante los altos niveles de inseguridad “esta instalación de cámaras nos sirve para pedir auxilio”.
Su colega Manuel Cruz sostuvo que la seguridad es para los pasajeros y para el conductor, “ya era necesario un poco más de seguridad”.