caída de ceniza
En Guayaquil, una persona retira la ceniza con un trapo; utiliza mascarilla para protegerse del COVID-19 y del polvo volcánico.Amelia Andrade

Las cenizas afectan en especial a los alérgicos y a quien ha tenido neumonía

Los doctores sugieren limpiar las cenizas con trapo húmedo o con aspiradora

Al despertar Leonor Piedra sintió la nariz tapada y pensó que podría ser coronavirus, pero tras ver las noticias y conversar con su doctor la conclusión fue que tenía alergia por la caída de cenizas en Guayaquil, el polvo fue lanzado por el Sangay, un volcán ubicado en la Cordillera Real, en la provincia de Morona Santiago.

Entonces,  es muy importante que el ciudadano pueda diferenciar entre una alergia y el COVID-19. El doctor Pablo Torres, especializado en alergia, indicó a Diario EXPRESO que lo mejor es consultar con un doctor. Sin embargo, la fiebre, el mal estar del cuerpo y dificultad para respirar que sea súbita no son síntomas cuando hay alergia; en conjunto son señales de un posible COVID-19.

Remarcó que un cuadro de alergia la persona no siente malestar en el cuerpo. Otra señal para saber que es alergia, es que pique la nariz.

Agregó que las cenizas afectan más a las personas con alergia, asma, rinitis, demartitis, etc. Sin embargo, esto no significa que quienes no tienen alergias no pueden ser afectados, la ceniza puede irritar las vías aéreas de cualquier persona. “A consecuencia de esto, en los consultorios vamos a tener más pacientes con tos, molestías de garganta, secreción nasal, estornudo, picazón de ojos, etc.”, dijo Torres.

El alergólogo recomendó que la limpieza debe ser con un trapo húmedo o aspiradora, pero mientras se retira la ceniza no debe estar presente la persona que tiene alergia, “lo mejor es que ingrese a la área 30 minutos después de que se limpió”.

Algo que puede ayudar es el lavado nasal con una solución salinas, indicó Torres.

carro con ceniza
Por la caída de cenizas en Guayaquil, así amanecieron los carros el martes 9 de junio.Cortesía

En tiempo del coronavirus otra pregunta que se abre es cómo la ceniza podría afecta a las personas que tienen cicatriz en el pulmón, los neumólogos Víctor Hugo Guzmán e Iván Cherrez, enfatizan que el polvo volcánico afecta a toda persona pero en especial a quienes algún tipo de problema en la respiración. Recomendaron que es mejor no exponerse a la ceniza, evitar salir por 48 horas.

Cherrez destacó que todo paciente que tiene una lesión en el pulmón la ceniza le puede afectar, por ser una sustancia que irrita, puede ingresar a los bronquios.

Sin una atención oportuna de los doctores un paciente, que tiene antecedentes de tener lesión en el pulmón, puede llegar a tener neumonía por respirar las cenizas. “Hay que evitar exponerse a las cenizas porque puede irritar la garganta, puede generar tos, falta de aire y silbido en el pecho. Después de esto puede existir tos con flema, entonces se hace bronquisti, y luego se puede generar una infección y esto provocar una neumonía por otra causa que no es el COVID-19”, dijo Cherrez.

De seguir el problema se sugiere cerrar puertas y poner trapos húmedos en las uniones de las ventanas, para minimizar el ingreso de la ceniza a la casa.