Un centro para el cuidado de menores está abandonado
La obra se deteriora en la parroquia Juan Bautista Aguirre. Los habitantes piden que la infraestructura sea adecuada para tarea de seguridad
Los habitantes de la parroquia Juan Bautista Aguirre (Los Tintos), del cantón Daule, ven con gran nostalgia cómo se deteriora, cada día un poco más, la infraestructura de una obra municipal, que fue construida hace aproximadamente nueve años para que funcionara como un Centro Infantil del Buen Vivir (CIDV).
Según los pobladores de la calle Ernesto López, donde está ubicado esta infraestructura, solo funcionó un año al cuidado de menores de la parroquia y los recintos. “Luego quedó abandonada hasta la actualidad y los roedores destruyen los implementos que están guardados”, comentó Linda Matamoros Barzola, habitante del sector y una de las denunciantes.
De llegar los uniformados de tránsito o policial a estar las 24 horas del día en esta zona, sería una gran ayuda para la seguridad de nuestra parroquia y sus habitantes.
Moradores del lugar, al ver que jóvenes con adicciones a las drogas usaban durante el día y la noche este sitio como escondite para consumir las sustancias prohibidas, el año pasado recogieron dinero para comprar bloques y cemento y cerraron definitivamente la puerta principal de acceso a estas instalaciones, que están con telas de arañas y se destruye cada día, como lo confirmó un equipo de Diario EXPRESO, luego de una visita al lugar, en días pasados.
Elvira León Zúñiga, presidenta del Gobierno parroquial de Juan Bautista Aguirre, junto a varios colaboradores de su institución, el miércoles pasado acudieron al sitio y receptaron la propuesta de cientos de moradores, quienes le solicitaron que se adecúe la obra y se la entregue a la Policía Nacional o la Comisión de Tránsito del Ecuador, para la seguridad de la población.
Manuel Morán, habitante de esta parroquia, manifestó que da pena que una obra que era de beneficio para los niños se destruya. “Lo que deseamos los pobladores de Los Tintos y la T es que estas instalaciones sean adecuadas para las autoridades de tránsito, para que haya mayor control y se evite accidentes graves, o que la Policía trabaje en esta parroquia, ya que desde hace muchos años no hay uniformados”, resaltó.
Nosotros cerramos totalmente la puerta principal de este centro infantil, porque daba miedo los hacheros que a cada rato venían a consumir sustancias prohibidas.
León confirmó que este centro que era para el cuidado de infantes tiene abandonado cerca de siete años y los moradores siguen custodiándolo.
“La ciudadanía me está solicitando que lo más rápido posible esto sea remodelado para la seguridad de nuestra parroquia. Vamos a conversar con el alcalde del cantón, Wilson Cañizares, para que esta obra municipal sea adecuada para el tránsito o para que la Policía resguarden el orden”, anotó.
La remodelación y adecuación de esta obra abandonada para la seguridad, no solo beneficia a los Tintos sino también al centenar de familias del sector la T y recinto Los Amarillos.
La obra fue realizada en la administración del alcalde Pedro Salazar, en el 2010, y actualmente es el Cabildo quien tiene la potestad, aseguró León.
EL CABILDO VISITARÁ LA OBRA
Alejandro Cedeño, vocero del Cabildo dauleño, expresó que tras realizarse la consulta a la Dirección General de Desarrollo Humano y Gestión Social, en los próximos días se realizará una inspección para verificar en qué condiciones se encuentra la obra. Recordó que estos centros infantiles estaban a cargo de los presidentes de las parroquias de Daule y que la competencia es de ellos. Pero, mencionó que se revisarán los documentos para saber de quién era la competencia cuando se lo habilitó.
