¿Qué hace el CEPAM y cómo apoya los derechos de la mujer en Ecuador?

El Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de las Mujeres (CEPAM) ha sido un pilar fundamental en la lucha por los derechos de las mujeres, niñas y adolescentes en Ecuador. Con más de 40 años de historia, CEPAM sigue abogando por una vida libre de violencia y el acceso a derechos sexuales y reproductivos. En una entrevista exclusiva a EXPRESO, Nadya Donoso, vocera de la organización, nos habla sobre la trayectoria institucional, y sus retos actuales.

Desde su fundación en 1983, el organismo ha estado comprometido con la promoción de los derechos de las mujeres, iniciando su labor con un enfoque en la salud sexual y reproductiva. Donoso comenta a este Diario que, con el tiempo, se dieron cuenta de que “la Violencia Basada de Género (VBG) era un problema estructural que afectaba no solo la salud, sino la vida integral de las mujeres”. Esto llevó a CEPAM a ampliar su enfoque y convertirse en una de las organización que promueve diariamente la erradicación de la violencia a la mujer desde su nacimiento hasta su vida adulta.

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Con esto en mente, solo en 2023, brindaron más de 103.982 servicios relacionados con violencia de género y salud sexual y reproductiva, con un impacto directo de 30.398 mujeres e indirecto a unas 60.769, según su banco de datos. Según Donoso, estas cifras reflejan “el compromiso de por parte de CEPAM con las comunidades más vulnerables de Guayaquil y de todo el Ecuador”.

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La vocera institucional también destaca el enfoque educativo que promueven desde sus inicios. “A través de procesos formativos hemos alcanzado a 6.301 personas, generando conciencia y herramientas para prevenir la violencia de todo tipo y promover los derechos”, alude. Los números, sin duda, reflejan la capacidad transformadora de la organización, pero Donoso aclara que “la lucha continúa y los desafíos siguen siendo enormes”.

Uno de los mayores logros de la entidad ha sido su papel en la tipificación del femicidio como delito en el código penal ecuatoriano. Además, fueron claves en el caso judicial de Paola Guzmán, joven que se suicidó tras enfrentar dos años de abuso sexual en una unidad educativa, y cuya sentencia en la Corte Interamericana de Derechos Humanos responsabilizó al Estado ecuatoriano por la violación de sus derechos. “Estos avances son conquistas importantes, pero no suficientes. Cada día se requiere un esfuerzo colectivo para consolidar estos derechos”.

Actualmente, el conglomerado organiza foros, capacitaciones, y acciones públicas para llevar este mensaje de independencia femenina, además, de luchar por un aborto más seguro, que no sea solo posible tras una violación, sino también en la libertad que puede ejercer una mujer de su cuerpo.

Ejecutan el proyecto Derechos desde el Inicio (DDEI) que propone elevar la conciencia sobre derechos y mejorar la Educación Integral de la Sexualidad (EIS).

Buscan en proyecto el fortalecer la autonomía integral de las mujeres usuarias del área de atención del CEPAM mediante el desarrollo de destrezas para el impulso de emprendimientos.

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