ARCSA CLAUSURA LOCAL
Este es el felino que, acorde al video de ARCSA, era el "guardián y controlador de plagas" del local ahora clausurado.Cortesía

Gato en restaurante no evitó la clausura: cucarachas y malas prácticas reveladas

ARCSA clausuró de forma temporal un negocio guayaquileño repleto de plagas e insalubridad

La Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) volvió a generar revuelo en redes sociales tras clausurar un restaurante en el norte de Guayaquil. Esta vez, la causa no solo fue la insalubridad del lugar, sino también la presencia de un curioso “empleado” que causó controversia: un gato.

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Un gato que no pudo con las plagas

El minino, que aparentemente desempeñaba funciones de guardia de seguridad y control de plagas, no logró evitar que el restaurante presentara graves deficiencias sanitarias. Según Arcsa, las instalaciones del local estaban infestadas de cucarachas, tanto en los pisos como en las paredes. Además, el felino, cuyo trabajo parecía ser tan peculiar como su atuendo de seguridad, tenía su caja de arena ubicada sobre las papas que serían utilizadas para preparar los platillos.

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"Las condiciones del local eran inaceptables. A pesar de la presencia del gato, las plagas eran notorias y las prácticas de higiene eran deficientes", indicó Arcsa, que procedió a clausurar el establecimiento hasta que los dueños del negocio realicen una limpieza profunda, organicen de mejor manera sus alimentos y “jubilen” al minino de su rol como control de plagas.

Reacciones en redes: humor y críticas

El video que la agencia compartió en sus cuentas oficiales generó diversas reacciones entre los ciudadanos. Algunos, con humor, lamentaron que el felino se "quedara sin trabajo". "Él no tiene la culpa de la insalubridad de su humano. Déjenlo trabajar, él solo quiere dormir y hacerse amigo de los insectos", comentó un usuario identificado como Santiago Luna, habitante del norte de Guayaquil.

Por otro lado, otros usuarios se mostraron preocupados por la calidad de los alimentos en los restaurantes de la ciudad. "Amigos, ¿se dan cuenta de lo que nos estamos metiendo al estómago? Posiblemente heces de cucarachas y las cucarachas mismas. ¿Acaso a los negocios no les da miedo que su local se haga público por la suciedad de sus administradores o dueños? Siempre sabemos a qué negocios se refieren tras los videos. Un poquito de vergüenza, por favor. Quieran a su gente y aliméntenla bien. A la larga, nadie querrá comer en los restaurantes de Guayaquil", sentenció Andrade, habitante de Sauces 6.

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Una llamada de atención para los restaurantes de la ciudad

El caso ha dejado claro que, más allá de la curiosa historia del gato, los restaurantes de Guayaquil necesitan mejorar sus prácticas de higiene y control de plagas. La preocupación de los habitantes es evidente, y muchos instan a que los dueños de establecimientos se comprometan con estándares más altos de salud pública para garantizar que los comensales reciban comida segura.

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