De la cocina al corazón: El viaje de Mataburgers

Andrés Mata es un hombre con cuya determinación y amor por su familia, ha cocinado más que solo hamburguesas. Su emprendimiento nació del apremio de ayudar a su hija Ana, quien padece una enfermedad inflamatoria intestinal incurable y que con un tratamiento adecuado puede tener una vida mejor. Fue esa esperanza la que encendió los fogones de Mataburguers.

Sin embargo, su expansión se dio por un asunto inesperado. Un día unas amigas de su suegra le sugirieron cocinar hamburguesas para ellas. Con todo preparado, Andrés se encontró con que el grupo nunca llegó, dejando las hamburguesas sin un destino claro. En lugar de desanimarse, decidió aprovechar la situación y comenzó a buscar oportunidades, tocando nuevas puertas de amigos con empresas y con llegada a instituciones públicas.

Este contratiempo se transformó en el punto de partida para su emprendimiento. Andrés logró expandir su negocio y establecer una red de clientes al ofrecer sus hamburguesas a diferentes organizaciones. Su capacidad para adaptarse y perseverar convirtió un fracaso momentáneo en una exitosa aventura.

Aunque en un inicio Andrés abrió cuentas para recibir ayuda benéfica para el tratamiento de su pequeña, subraya que actualmente las cerró, porque con la acogida que ha recibido su emprendimiento espera cubrir el tratamiento de su hija. 

El cariño de los amigos superó lo imposible

Gracias a este movimiento que hubo en redes con el caso de Anita, ella pudo recibir un diagnóstico acertado en el extranjero así como dar con el tratamiento. También se abrieron puertas con la Presidencia y el IESS. 

A través de estas conexiones, surgió la idea de crear mesas técnicas para incluir ciertas enfermedades catastróficas que no están actualmente en el sistema médico. Estas mesas permitirán, cuenta Andrés, exigir que se cubran gastos y tratamientos de dichas enfermedades y que se puedan enviar casos al exterior o derivar a hospitales privados.

Ahora, Andrés se concentra en nueva aventura: El Burger Show. En su cuarta edición, el festival reúne hasta este domingo 28 de julio, a 60 emprendedores, cada uno ofreciendo sus propias versiones de hamburguesas. Un evento que se desarrolla en la explanada El Dorado y en el que  Andrés competirá en la categoría “tradicional”, con la esperanza de levantar la corona de campeón.

“Mi sueño es levantar ese cinturón de campeón en este Burger Show, en la categoría tradicional. Creo que eso es una plataforma, un salto que te da a hacerte conocido. Y si no lo gano, igual seguiré trabajando para llegar a ese objetivo y que esto vaya creciendo para ser un negocio que pueda ayudar no solo a Anita, sino a otras personas”, concluyó.

MataBurgers no es solo un emprendimiento, es el sueño de la esperanza, la lucha y el amor de un padre dispuesto a todo por su hija y su familia.

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