Comandante de Zona 8: “Vamos a intervenir con fuerza 60 puntos críticos en delitos”

De enero al 24 de mayo pasado, en la Zona 8 hubo 220 muertes violentas, un 60 % más que en 2020. Un 86 % de los casos, según las estadísticas de la Policía, usó armas de fuego, y las causas en un 78 % estuvieron ligadas al tráfico de drogas. EXPRESO habla con el nuevo comandante de la Zona 8, Fausto Buenaño, sobre este escenario y las razones por las que no se logra tener seguridad, pese a los intentos.

- En Guayaquil se han hecho varios intentos por reducir la inseguridad, el último fue en diciembre que llegaron 500 agentes de forma temporal. Ellos se fueron y hay un incremento de delitos. ¿Qué acciones van a tomar?

- Tenemos tres ejes: el preventivo, investigativo y de inteligencia. En el preventivo el policía está en la calle y así hemos identificado ya 60 puntos críticos en delitos, que vamos a intervenir con fuerza. Estos puntos se han reforzado con la presencia de más policías, con los 250 agentes más que ahora han llegado. También hemos ubicado agentes sin uniformes, para investigar y hacer inteligencia.

- Entonces, ¿por qué se siguen dando estos hechos?

- Lo que está pasando en Guayaquil y Durán son enfrentamientos de organizaciones que se pelean territorios y hasta los puertos para enviar sustancias sujetas a fiscalización. Ayer intervenimos Posorja, no solo la población también las carreteras.

- Pero, ¿por qué hubo logros cuando hubo un refuerzo de 500 policías? Ellos se van y aumentan los delitos...

- Hemos seguido trabajando y hemos capturado a bandas. Días atrás en la cooperativa Juan Montalvo, en el norte de Guayaquil, por ejemplo, cuando se asaltaba una farmacia, pasó el agente que vigilaba la zona y atendió el caso. Hubo cruce de balas y falleció el delincuente. Ayer detuvimos, en cambio, a tres miembros de las organizaciones de Durán, Latin King y Chone Killers. Se está actuando.

- ¿Por qué han incrementado las muertes violentas en la Zona 8?, ¿cuál es la solución?

- Las víctimas tienen antecedentes criminales. Se han dado 220 muertes violentas de enero a 24 de mayo de este año, el aumento es de un 60 % en relación al 2020. Los enfrentamientos se dan hasta por mal reparto. Dado que se están usando más armas de fuego, un aporte importante es el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas en los controles que ellos hacen de las armas.

- ¿Frente a esas cifras se puede decir que las estrategias que han usado han sido débiles o equivocadas?

- Ninguna de las dos cosas, porque la Policía está trabajando. Lo que está pasando tiene origen en la cárcel, de allí salen muchas de las órdenes y esto tomó más fuerza después de los enfrentamientos que se dieron en la cárcel. Urge que se revisen todos los centros de rehabilitación para que cumplan con su misión.

- Si el problema de fondo son las drogas, ¿cuál es la solución?

- Ya lo anunció el ministro de Gobierno, se va a unir esfuerzos con ayuda internacional de Estados Unidos y de Europa. Por ahora no podemos dar detalles de la estrategia que arman, ni acciones que se realizarán, mas serán contundentes. Pero es claro que se debe llegar a las familias. Se requiere trabajar en conjunto con los ministerios de Inclusión Económica y Social, de Educación y Salud, para evitar que más jóvenes ingresen a las bandas de los delincuentes. Se requiere que menos niños crezcan en ambiente de violencia, de consumo de drogas, de maltrato a la mujer y de alcoholismo. Hemos encontrado que niños de 8 años de edad consumen drogas, y eso no puede continuar así.

- ¿Cómo puede aportar la ciudadanía?

- Tenemos los chats comunitarios y necesitamos que los ciudadanos sean nuestros ojos y oídos.

- ¿Pero eso es suficiente?

- Es complementario. La base son los tres ejes que dije al inicio. Además, para luchar contra el narcotráfico se necesita de una labor macro, donde participen en conjunto y coordinadas las entidades que ya indiqué. Esto no depende solo de la Policía. Por ejemplo, en Durán trabajamos tres meses haciendo investigaciones para detener a miembros de organizaciones delictivas y en una semana los dejaron libres.

- ¿Cómo evitarlo?

- Hay que endurecer las leyes. También los centros deben ser realmente de rehabilitación, para evitar que las personas privadas de la libertad salgan más violentas.

- ¿Qué esperan del nuevo gobernador?

- Que trabaje guiado por la data y por las investigaciones reales. Hay que alinear la política pública con la situación de seguridad que hay, se requiere partir de la familia.

- La administración saliente, ¿no trabajaba con data?

- No he dicho eso. Lo que indico es la forma de tener logros y tener clara la situación.

- Los comerciantes de la bahía dicen que tienen que pagar para que no los asalten.

- Allí está trabajando la policía judicial.

- Pero, ¿es verdad que los delincuentes les están pidiendo dinero para no asaltarlos?

- No hay denuncia oficial.

- ¿Aún faltan carros, armas y personal? ¿Necesitan herramientas para laborar?

- Con lo que tenemos estamos trabajando. Pero siempre hará falta algo.

- ¿Les ayuda no ser acusados si les toca disparar?

- Antes no se podía disparar, si lo hacía el agente era investigado, así la otra persona estuviera armada. Ahora eso cambió. Ahora si se dispara a un delincuente con razón, no somos acusados. Hay apoyo legal y del Gobierno. Claro, sin abusos.

- ¿Que el escenario haya sido distinto antes, ayudó a que el delincuente gane terreno?

- Sí, ellos sabían que estábamos limitados para disparar, que era una debilidad.

- ¿Hay aún lugares donde ni la Policía entra? Es la queja ciudadana.

- Hay lugares donde hay que entrar con más fuerza. Por ejemplo, en ciertas partes de Siete Lagos y la Trinitaria.