Coronavirus: No es posible todavía saber cuándo Ecuador podrá convivir con el virus y recuperar su vida normal
Para agilizar el proceso, médicos sugieren nuevas medidas de ayuda.
Si por una o dos personas que todavía salgan a la calle incumpliendo los protocolos de emergencia y el estado de excepción, en el país aún resulta incierto saber cuándo los ciudadanos podrán volver a tener una vida normal.
Así lo afirman dos médicos consultados por EXPRESO que, teniendo en cuenta que en el mundo todavía no se ha desarrollado una vacuna para combatir el patógeno, advierten que no es posible determinar si uno o dos meses serán suficientes para reducir las cifras de contagio y entonces salir a las calles, teniendo al virus aún vivo.
Las medidas tomadas y el hecho de quedarse en casa, si se cumpliera a cabalidad (algo que no pasa, según lo ha constatado este Diario en publicaciones anteriores), en efecto sí ayudará a que el proceso sea más rápido, precisa el neumólogo y alergólogo Iván Chérrez.
Mientras un barrio o una o dos personas sigan incumpliendo las medidas, todos nos veremos afectados. Si esto no para, los casos tampoco. La situación será peor.
“Si baja la curva de infección, no se reportan más casos y los que tienen el virus, empiezan a sanar; solo ahí se puede pensar en retomar las actividades”. Quizás eso sea dentro de 30, o 45 días, piensa Chérrez. Pero agrega que de lograrse ese objetivo, la población deberá mantener las mismas condiciones de cuidado y prevención actuales. Incluida la medida de no realizarse actividades ni ir a espectáculos donde las personas puedan aglomerarse.
La situación no es tan sencilla. En Alemania, cita como ejemplo, los médicos están considerando viable suspender el fútbol todo el 2020. “Acciones como esas habrá que adoptar, es necesario”.
Washington Alemán, infectólogo, tiene un pensamiento similar e incluso hace un llamado a que todos -las familias, empresarios, informales- sigan al pie de la letra las medidas para pensar en el mañana.
“Si la gente sigue caminando en las calles, no se cortará la transmisión...”. Por eso asegura que desde el Gobierno debe crearse un programa de contención social para que las familias reciban alimentos , suero oral, paracetamol y mascarillas.
La situación es grave. Por eso antes de ver qué pasa mañana, hay que ver qué se hace en este momento. El virus sí dura 14 días, pero solo si todos nos quedamos en casa.
“El informal seguirá saliendo si no tiene cómo comprarle comida y esos medicamentos a los suyos. Si el Gobierno lo facilita, no saldrá más. Hay que pensar en las personas de bajos recursos”. De lo contrario, dice Alemán, la epidemia se mantendrá, al igual que la cuarentena y la paralización.
Si embargo, hay especialistas como el director de la Clínica Guayaquil, Roberto Gilbert Febres Cordero, que consideran -sin dar tampoco una fecha exacta- que es necesario dentro de poco ya salir, teniendo en cuenta, eso sí, una serie de precauciones.
“¿Hasta cuándo va a resistir el bolsillo del ecuatoriano? Hay que tener presente también esto. Sí se puede trabajar con gel, agua y jabón, mascarillas, guantes, termómetros. Con una o dos enfermeras que monitoreen la sintomatología a cada empleado, antes de ingresar a la empresa, se puede”, agrega.
En la Clínica Guayaquil adquirimos los reactivos para hacer también las pruebas. Por eso pido a Salud y a la Aduana que le den viabilidad al proceso, que permitan que salgan de Fedex (compañía logística internacional) al hospital. Tener identificados los casos, cada vez con más rapidez, ayudará a reactivarnos más rápido.
Ecuador no podrá mantenerse mucho tiempo paralizado, enfatiza. De allí que sugiere al Gobierno adquirir esos implementos de cuidado para que sean entregados en las fábricas. “Aquí hay desabastecimiento. El Gobierno podría pedir a Panamá, por citar un caso, termómetros. Con equipamiento, se podrá convivir con el virus. La vacuna no siempre es necesaria, además que tarda meses en llegar. La higiene puede protegernos”, detalla. El
SERVICIO:
“El 171 no sirve para nada”
El infectólogo Washington Alemán es claro. Para él, llamar al 171 cuando hay sospecha de sintomatología, “no sirve de nada”. El sistema de salud en general, advierte, está colapsado. Incluso porque el pánico ha ido ganando terreno, y los especialistas se han ido enfermando o retirando.
"Me tocó recibir a varios pacientes con síntomas febriles y tos fuerte. Estaba preocupado porque no tenía la mascarilla ni la prenda adecuada para atender al enfermo". Así vive el personal médico ecuatoriano en época de coronavirus.🔽https://t.co/z4EeAf4Abh
— Diario Expreso (@Expresoec) March 21, 2020
Ante ello, Alemán recomienda abrir hospitales que están cerrados a nivel nacional y solicitar el asesoramiento a China .“Necesitamos de sus experiencia en este virus para ir coordinando nuevas medidas. Hay que pedir el apoyo a más profesionales. Necesitamos que todos los médicos jubilados o que están en cuarentena den su ayuda a través de consultas en línea”, agrega.
