Coronavirus: Unicef y Unesco piden estabilidad laboral para el docente ecuatoriano
Exhortan al Estado a que les entregue las herramientas necesarias para que realicen su trabajo
La Unicef y Unesco exhortaron a las autoridades educativas del Ecuador a mantener la estabilidad laboral de los docentes y brindarles las herramientas necesarias para llevar a cabo su trabajo, durante la emergencia sanitaria por la pandemia mundial del COVID-19.
Martha Córdova: “A los planteles privados les preocupa quedarse sin alumnos”
Leer más“Los docentes constituyen un apoyo fundamental para las familias en momentos de emergencia. A través de ellos, no solo se garantiza el derecho a la educación de los niños, sino que las familias pueden recibir consejos concretos y sencillos sobre actividades que ayudan a bajar los niveles de estrés, angustia y violencia”, manifiesta un comunicado de estos organismos internacionales.
Por ello señalan que es fundamental que los maestros mantengan contacto regular con los estudiantes y sus familias, de manera remota, con el fin de favorecer la cohesión social, prevenir la violencia intrafamiliar y asegurar la continuidad del aprendizaje.
Además instan a los tomadores de decisiones de las distintas funciones del Estado a incrementar la conectividad y el acceso a comunicación de los docentes para que puedan continuar con su labor; así como a emplear medidas que incentiven a los medios públicos, comunitarios y locales a difundir contenidos educativos de calidad bajo los principios de educación en emergencias.
Coronavirus: Bachillerato Internacional inicia clases el 23 de abril
Leer másLa Unicef y Unesco reiteran su apoyo al Ministerio de Educación para adaptar la educación en el contexto actual a través de plataformas virtuales, contenido educativo para televisión, radio, redes sociales, y a su vez, apoya con acompañamiento pedagógico y psicosocial a través de llamadas telefónicas semanales a las familias.
Resaltan que en el contexto de emergencia, los estados deben hacer su máximo esfuerzo para velar por el acceso universal y sin discriminación a la educación de los niños, niñas, adolescentes y adultos que estudian, tal como lo establecen los instrumentos internacionales y la propia Constitución del Ecuador en su artículo 26.
“Suspender la educación implica la interrupción del sentido de normalidad y regularidad que favorece el desarrollo y la estabilidad socioemocional de la población en contextos de crisis”, aseguran, al reiterar que el impacto de esta emergencia podría ser aún más grave si la educación se detiene.