Coronavirus: El dilema de vivir en Daule y frecuentar Guayaquil

El segundo día de semáforo amarillo de Daule movió ayer aún más el dinamismo en los centros comerciales, cuyas tiendas abrieron esperanzadas en que llegaran los clientes; y sacudió también a Guayaquil porque varios comercios se animaron a reabrir pese a que se permanece en luz roja, por la pandemia de COVID-19.

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Uno de los factores que provocaron mayor movimiento en Guayaquil, donde la afluencia de vehículos llegó incluso a formar pequeñas columnas de tráfico en vías como la Francisco de Orellana, fue la aprobación del ingreso a Guayaquil desde el territorio de Daule de cientos de carros, por el número de placas, desde la mañana de ayer.

El paso de vehículos de Daule a Guayaquil, hasta el martes (primer día de semáforo amarillo), era prohibido si el número de placa no era el permitido en esta urbe. La falta de coincidencia entre ambas ciudades dejó en la parroquia urbana La Aurora, el pasado martes, la retención de 20 automotores, al menos 68 multas y cientos de quejas en las redes sociales.

En la noche del martes, el Comité de Operaciones Emergentes (COE) nacional acogió el pedido de Daule de acoplarse a las restricciones de movilidad de Guayaquil, para permitir que las placas aprobadas sean de los mismos dígitos en ambas urbes y así la población de La Aurora y de las ciudadelas asentadas en la vía León Febres-Cordero pudieran transitar en ambas localidades.

Pero en Daule, cada carro, por la luz amarilla, puede circular dos veces por semana y en Guayaquil, con luz roja, solo puede hacerlo una vez. Es así que aunque Daule copie las placas por día de Guayaquil, un grupo de conductores se sienten encerrados en una burbuja en la que pueden circular, pero no salir hacia Guayaquil.

“Yo tengo mi negocio de comida en Guayaquil, pero vivo en Villa Club. En Daule puedo sacar el carro dos veces a la semana, pero de esas solo un día puedo ir a Guayaquil. Que se cambie de semáforo no me ha beneficiado mucho”, explicó Galo Zambrano, conductor.

Como él, decenas de personas se encontraban en la misma encrucijada.

Ayer en la mañana un grupo de agentes de la ATM realizó un operativo en el puente Vicente Rocafuerte, que une a ambas ciudades, para verificar placas y salvoconductos de quienes querían ingresar a Guayaquil.

El operativo formó una columna de más de cuatro kilómetros de tráfico y antes de las 10:00 ya se había sancionado a 24 conductores, cuyos vehículos fueron regresados a Daule porque no podían entrar a la ciudad.

“Yo pensé que podía ir a visitar a mi mamá, que está sola en Guayaquil, dos veces a la semana, pero igual solo podré hacerlo una vez. Nosotros frecuentamos Guayaquil aunque vivimos en territorio de otro cantón”, narró Karla Estrada, quien vive en la urbanización La Joya.

Las confusiones eran constantes. El general Luis Lalama, director de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM), indicó que los carros no están siendo retenidos, por ahora, porque la medida se estaba familiarizando entre los conductores. “La medida que viene por el cambio de semáforo es para Daule no para Guayauil. Nosotros controlamos que respeten los dígitos establecidos para Guayaquil y la validez de los salvoconductos. Los multamos con medio sueldo básico y con 9 puntos menos a la licencia”, recordó.