Educación: una renovación de Guayaquil propuesta desde diversos ámbitos

La renovación de una ciudad implica nuevos conceptos y diseños urbanísticos y la Universidad de Guayaquil ya los está desarrollando y proponiendo. El crecimiento económico de la urbe exige que se vuelva más competitiva y para ello se requiere de ciencia, innovación y tecnología, que es lo que ha planificado aportarle la Escuela Superior Politécnica del Litoral, ESPOL.

Esa transformación necesariamente debe incluir a quienes habitan la ciudad y por ello la Universidad Ecotec se propone mantener las características de los guayaquileños: solidaridad, amabilidad y esfuerzo; y trabaja en cinco pilares para que se constituyan en el sello de sus graduados: innovación, investigación pertinente, internacionalización, conciencia ecológica y ser referentes.

Y también demanda que esa población, sobre todo la de sus jóvenes, deseche el conformismo y la mediocridad y asuma por el contrario un espíritu rebelde, inconforme con el estatu quo y se fije el desafío de cambiarlo, de transformarlo para mejorar, que se vuelvan incómodos como la generación de profesionales que para ese fin se propone formar la Universidad Casa Grande.

Así, la renovación de Guayaquil es también un objetivo en el que ya trabaja la Academia porteña, desde sus respectivos ámbitos de especialidad que no se excluyen, sino que se complementan, como lo exponen a continuación cuatro rectores universitarios.

• Francisco Morán: “La Universidad de Guayaquil realiza proyectos arquitectónicos para la renovación urbanística de Guayaquil”

La Universidad de Guayaquil siempre se está renovando para dar un servicio educativo de alta calidad que beneficie a todos los sectores de la sociedad. Es la institución de educación superior que ofrece la mayor cantidad de cupos anuales (17.000), lo que permite que más ciudadanos puedan formarse en las diferentes áreas del conocimiento, atendiendo de ese modo las necesidades actuales y futuras de nuestra ciudad.

La Facultad de Arquitectura y Urbanismo realiza diferentes proyectos que buscan la renovación urbanística de Guayaquil, como lo prueban los trabajos presentados en el concurso de Diario EXPRESO ‘Al Rescate de la Avenida 9 de Octubre y del casco central de Guayaquil’.

También se han entregado varios proyectos a las autoridades municipales y se están trabajando otros que integran las 41 hectáreas del Campus Norte UG con la comunidad de las ciudadelas Mapasingue, Martha de Roldós y el sector de las avenidas Juan Tanca Marengo y Las Aguas.

Un propósito a corto plazo es integrar nuestro edificio patrimonial, la gloriosa Casona Universitaria ‘Pedro Carbo’ como un espacio cultural para la visita guiada de la comunidad.

En el área de la vinculación con la sociedad nuestra institución ejecuta 35 proyectos que inciden en las Zonas 5, 6 y 8, que benefician a 362.487 ciudadanos.

Otro servicio que fortalece nuestro vínculo con la ciudad es el ofrecer de manera gratuita la educación inicial, básica, básica superior y el bachillerato a 900 estudiantes en nuestras unidad educativa Minerva y del colegio Francisco Huerta Rendón, beneficiando a la comunidad con educación de calidad.

También en lo académico se han creado siete nuevas carreras que tienen pertinencia y responden a necesidades actuales. Estas son: Ciencia de Datos e Inteligencia Artificial, Ingeniería de Alimentos, Ingeniería Agropecuaria, Arte, Ciencias Políticas, Entrenamiento Deportivo y Economía Internacional. En cuarto nivel tenemos 58 programas de postgrado, entre las que tenemos las Maestrías en diversas áreas.

• Cecilia Paredes: “La ESPOL le apuesta al crecimiento económico de la ciudad con base en la ciencia, tecnología e innovación”

La ESPOL siempre ha trabajado por el desarrollo de Guayaquil. Hoy nos urge trabajar junto a toda la sociedad para mejorar la competitividad de la ciudad y no quedarnos fuera de la transformación digital. La Academia en general, y la ESPOL en particular, le apuesta a la ciencia, la tecnología y la innovación como eje de desarrollo de los territorios, y tenemos que intensificar esa apuesta por el crecimiento económico basado en la Ciencia.

En este contexto, con el apoyo del BID implementaremos el proyecto ‘Fortalecimiento del Ecosistema de Innovación del Litoral Ecuatoriano’, que empezará a ejecutarse desde 2024 y por un periodo de cinco años con el objetivo de elevar la productividad empresarial de la región a través de una mayor inversión en actividades de ciencia, tecnología e innovación.

Este proyecto que pudiera parecer muy alejado de los guayaquileños, justamente tiene el propósito de mejorar sus condiciones de vida. Llegaremos a todo el tejido productivo, y así, a generar oportunidades sin olvidar la inclusión de los más jóvenes. Un componente se enfoca en el fortalecimiento del ecosistema del emprendimiento dinámico y de innovación de Guayaquil, que fomente la creación de empresas de base tecnológica y su sinergia con empresas establecidas, Mipymes innovadoras; y el desarrollo de capacidades digitales para los jóvenes de la ciudad.

El otro componente está relacionado con el fortalecimiento de la producción y vinculación científica de la ESPOL orientada a las necesidades del sector agroindustrial del Litoral, y a promover la creación y el crecimiento de nuevas organizaciones altamente tecnológicas.

Desde la ESPOL apostamos por este proyecto que dinamizará la producción científica, el diálogo y cooperación academia-empresa, la transferencia y extensión tecnológicos, y la creación y el crecimiento de empresas de base tecnológica, aportando así directamente a la renovación de Guayaquil.

• Ernesto Noboa: “La formación de jóvenes incómodos es la inversión a largo plazo de la Universidad Casa Grande para Guayaquil”

Guayaquil necesita más jóvenes incómodos con el estatu quo, dispuestos a asumir el reto de transformar nuestra realidad. Formar para incomodar es una oportunidad para construir una ciudad más segura, inclusiva y sostenible. Y este es mi rol como rector de la Universidad Casa Grande, y una de mis maneras de devolver a Guayaquil lo que ella me ha dado: asegurarme de mantener a nuestra comunidad universitaria fiel a nuestro propósito de “Formar para incomodar”, desarrollando habilidades y conocimientos que contribuyan a transformar el estado de nuestra urbe, a construir un futuro de oportunidades y bienestar para todos.

Los desafíos de Guayaquil son innegables. Inseguridad, falta de oportunidades, carencia de planificación sustentable y el clasismo son solo algunos. Sin embargo, en lugar de resignarnos o quejarnos, levantamos la voz y lo dejamos todo para formar generaciones de jóvenes inconformes, incómodos con el estatu quo, dispuestos a ser parte de las soluciones. La UCG se convierte en el epicentro de esta formación. Es en este espacio de conocimiento y aprendizaje donde los jóvenes adquieren las herramientas necesarias para analizar, cuestionar y proponer cambios. Aquí, se les brinda una educación integral que no solo se enfoca en el desarrollo académico, sino también en cultivar valores como la responsabilidad social, la empatía y el compromiso con la comunidad.

Graduar jóvenes inconformes con el estado de la ciudad implica formar agentes de cambio comprometidos con la construcción de una sociedad más justa y equitativa, formar líderes que piensan de manera crítica, que proponen soluciones innovadoras a los problemas que enfrentamos. La incomodidad es la chispa que enciende el fuego del cambio, y la creatividad, el espíritu emprendedor y la colaboración la leña que lo sostiene. Es a través de la incomodidad que se gestan las ideas revolucionarias y se generan acciones concretas.

La formación de jóvenes incómodos es nuestra inversión a largo plazo en el futuro de Guayaquil.

• Gilda Alcívar: “Para Ecotec, el trabajo en identidad y cultura es la base para transformar a los ciudadanos y así, renovar la ciudad"

Ser guayaquileño implica la responsabilidad de mantener y reinvindicar los valores que nos caracterizan: solidaridad, amabilidad y esfuerzo.

Trabajar desde la academia nos permite formar profesionales que mantengan esos valores a través de su vida. Desde la fundación de la Universidad, hace 16 años, en Ecotec, trabajamos cinco pilares de gestión que son el sello de nuestros graduados: innovación, investigación pertinente, internacionalización, conciencia ecológica y ser referentes. Estos pilares se traducen a las nuevas características que quienes viven en Guayaquil deben tener para fomentar el desarrollo sostenible de la ciudad y su constante renovación.

Innovación, manteniendo la esencia de Guayaquil e incorporando la lógica de una ciudad inteligente, dinámica, tecnológica.

Internacionalización, Guayaquil conjuga una ubicación geográfica estratégica, el dinamismo propio de un puerto y la amalgama de culturas que le permite ser un destino clave para el turismo como actividad económica, cultural y de proyección.

Investigación pertinente, uno de los proyectos icónicos de investigación en la Universidad Ecotec es la bioremedación del Estero Salado, espacio natural que baña nuestro Campus Juan Tanca Marengo y que debe ser recuperado como uno de los atractivos que combina naturaleza, impacto ambiental y cohesión ciudadana.

Conciencia Ecológica, vivir en una ciudad de río como Guayaquil, con reductos naturales como el manglar, la Isla Puná, Cerro Blanco, el Estero Salado, conlleva una importante responsabilidad en su conservación. El ADN de ECOTEC es la formación y la gestión con sostenibilidad, teniendo como objetivo una nueva generación de ciudadanos que tengan impacto positivo en el planeta.

Ser Referentes, estando concientes de los valores que nos identifican, de la potencia de nuestros atributos naturales y de la fuerza de Guayaquil, los guayaquileños podemos ser referentes. El trabajo en identidad y cultura es la base para transformar a los ciudadanos y así, renovar la ciudad. Desde la Universidad Ecotec, lo hacemos con el ejemplo y con el ímpetu de una institución que sabe lo que los cambios en la sociedad se logran con educación.