Ernesto Hidalgo, el guayaquileño que conquista Madrid con panes de yuca
Guayacos: Ernesto Hidalgo, junto a su hermano y su cuñada, decidieron mudarse de Guayaquil a Madrid para emprender con productos ecuatorianos y latinoamericanos. Así nació: 'Pandino'
Guayacos es una sección en la que contamos historias de los habitantes de Guayaquil, vidas que alimentan y hacen más rica esta ciudad. Relatos que ayudan a conocer mejor la madera de la que están hechos.
En la calle Víctor Hugo, entre las avenidas Infantas y La Reina, a unos 200 metros de la reconocida Gran Vía, en la ciudad de Madrid-España, está 'Pandino', un trocito de Ecuador. Para los paisanos, e incluso, para personas de otros países latinos, entrar a ese local es reencontrarse con su tierra, su ambiente y su gente. Para los españoles, significa sumar a su paladar un sabor exótico y abrir más su persiana del conocimiento.
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Leer másEl propietario de ese sitio es el guayaquileño Ernesto Hidalgo, de 36 años de edad. Él junto a su hermano Alberto y su cuñada Verónica, abrieron el negocio en 2019, luego de planificar montar su propio emprendimiento por más de dos años.
“A finales del 2017, con mi hermano estábamos queriendo expandir horizontes. Y decidimos venir a Madrid para emprender con la idea guayaquileña del yogur y pan de yuca. Estuvimos desde el 2017 trabajando paso a paso en la mudanza, en cómo sería el local, dónde abriríamos el negocio. Recorrimos muchas zonas para ver si vendían panes de yuca. Hasta que en 2018 conseguimos un local en el centro de Madrid, lo alquilamos y lo reformamos”, Ernesto recuerda con entusiasmo los inicios.
Si bien el bocado principal del sitio es el yogur y pan de yuca (este último, libre de gluten, también lo venden congelado y listo para hornear), no es lo único que los hermanos Hidalgo venden. Su oferta gastronómica se concentra en cuatro componentes: la yuca, maíz, el trigo y el verde. Con ellos preparan tequeños (que son aperitivos venezolanos); empanadas argentinas, empanadas de verde y arepas.
No obstante, desde enero pasado han añadido, con el mismo sello de su marca Pandino, una salsa picante que viene en sabores de maracuyá, tomate de árbol, de ají rocoto y la casera. En cuanto a bebidas, ofrecen una variedad de distintos de países andinos: las cervezas Cusqueña de Perú, la Kilner de Argentina, la Polar de Venezuela, la Postobón de Colombia, la Pilsener de Ecuador y otras. Además desde la próxima semana venderán salprieta.
“La idea es mostrar la esencia de productos horneados y bebidas de nuestros países andinos en Madrid. Aquí vienen muchos guayaquileños que extrañan el pan de yuca. Se alegran cuando entran al local y disfrutan de estos bocados”, narra el emprendedor. Él, quien es economista de profesión, con su hermano Alberto, quien es arquitecto, se encargan de administrar el local, y con la ayuda de un empleado venezolano, atender y servir a los clientes. Su cuñada Verónica, quien es chef, es la encargada de la cocina.
Desde su comienzo y pese a la pandemia de la covid-19, que inició en 2020 y que les afectó económicamente, el negocio ha crecido. Tanto así, que estos hermanos han logrado introducir sus productos en 30 puntos de ventas de los barrios de Madrid y en una semana se comercializarán en Barcelona. Los pedidos pueden hacerse online, con entrega a domicilio, a través del portal web de Pandino.
El 60 % de los clientes que visitan Pandino, son españoles y el 40 % son latinoamericanos. Los latinos llegan con una sonrisa, porque reconocen los aperitivos, las bebidas, y las imágenes de los paisajes andinos que en la pantalla del televisor se reflejan todo el día para los visitantes. Observar las fotografías de las montañas, las animales, los ríos, la cultura... los transporta a su origen. Por su parte los españoles y demás europeos, suelen llegar recelosos y curiosos por aquellos productos. Pero al final se convencen, lo disfrutan y vuelven.
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Leer más“Muchos españoles entran por curiosidad y preguntan: ¿Cómo puedes mezclara un pan de yuca con yogur, algo dulce con salado? Pero, luego de que lo prueban les gusta. Hay otros que llegan y de inmediato reconocen a Ecuador porque en las imágenes sale Galápagos, Quito, Montañita... y esto es bueno para nosotros, porque no solo damos a conocer los productos de nuestra tierra sino que además a nuestro país”, menciona.
Ernesto y su hermano decidieron emprender en Madrid, luego de ir a vacacionar a esa ciudad y notar que allí había una gran cantidad de latinos y a la vez una ausencia de sitios donde degustar uno de sus bocados favoritos: panes de yuca con yogur. Esa era una brecha que había que aprovechar.
Ernesto, su hermano y su familia pretenden abrir un nuevo local Pandino en los próximos meses, quedarse en Madrid, crecer más en el negocio y aumentar su oferta gastronómica conectada a las delicias guayaquileñas, de Ecuador y de los países de la región.