Guayaquil clama por innovación en medios para turismo inclusivo
No todos pueden acceder físicamente a los cerros. La ciudad debe apostar por sistemas de transporte como los funiculares
Hay ciertos lugares icónicos de Guayaquil que no son de fácil acceso para la ciudadanía, y la única manera de disfrutarlos es mediante el ascenso de múltiples escalinatas, como es el caso del Barrio Las Peñas. Expertos consultados por EXPRESO manifiestan que eso podría ser superado por medio de la implementación de un sistema de transporte.
Guayaquil: Los miradores requieren vitalizarse
Leer másVarios cerros de la urbe porteña gozan de miradores naturales, los cuales tienen un gran potencial turístico que podría ser explotado mucho mejor actualmente, expresa David Hidalgo, arquitecto, experto en gestión urbana y catedrático de la Universidad de Guayaquil. Es por esto por lo que menciona que los funiculares, como parte de una movilidad inclusiva, garantizarían una mayor comodidad para que la ciudadanía suba estas pendientes pronunciadas.
Atractivos turísticos poco accesibles
Este sistema de transporte, sugiere el arquitecto Hidalgo, podría ser implementado en sitios como: el cerro del Carmen, para acceder al mirador del Monumento al Sagrado Corazón; al cerro Santa Ana, para subir al Faro, ubicado en el barrio Las Peñas, en la cúspide de este lugar; o a Mapasingue Este. Este último sector, señala el docente, es un sitio que tiene potencial para el diseño y construcción de un mirador por parte del Municipio de Guayaquil.
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David Hidalgo
Lugares referentes en Sudamérica
José Alberto Medina, docente en la carrera de turismo y coordinador académico del Sistema de Educación a Distancia de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, comenta que ciudades como Santiago y Valparaíso (Chile), Bogotá (Colombia) son precisamente referentes de que se puede desarrollar este tipo de sistema de transporte. Hidalgo recalca que ese tipo de infraestructura de transporte para fines turísticos o de movilidad urbana no ha sido construido en el país, por lo que si Guayaquil lo implementa, sería la primera ciudad en Ecuador que contaría con este medio.
Además, permitiría que haya accesibilidad, un factor del que están careciendo varios atractivos turísticos de la ciudad, enfatiza Medina. De esta forma, indica, se democratizaría el disfrute del entorno sin que haya algún tipo de limitante.
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José Alberto Medina
Turismo y cotidianeidad
Para Guillermo Ponce, ingeniero civil, presidente de la Comisión de Estructuras del Colegio de Ingenieros Civiles del Guayas, docente y director del Subsistema de Investigación y Desarrollo de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, los funiculares serían “una buena alternativa” para los adultos mayores, habitantes, personas con discapacidad y turismo. Ponce menciona que este transporte promovería el turismo hacia el río Guayas y contaría con una vista espectacular a este.
Además, a partir de poder modernizar la experiencia turística en estos miradores naturales, esto mejoraría la calidad de vida de las personas que viven en estos sectores, es decir, se convertiría en un medio de transporte, señala el arquitecto. Por otra parte, expone el ingeniero civil Ponce, la instalación de los funiculares sería más barata que la colocación de un teleférico o un ascensor.
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Guillermo Ponce
Otras alternativas para la accesibilidad
No obstante, existen otras alternativas complementarias de movilidad, como escaleras eléctricas al aire libre, como los implementados en Escalinatas y el Tiempo, ubicado en el pasaje Pelileo, en Ambato; o en la Comuna 13 San Javier, en Medellín, Colombia, ejemplifica Hidalgo. También los ascensores, como los colocados en el mirador Luis Alberto Sampedro, en el sector de las antiguas lavanderías, junto al río Pove, en el centro de Santo Domingo de los Tsáchilas (Ecuador) y el Elevador Lacerda en la ciudad de Salvador en Bahía, en Brasil.
Ponce explica que el sistema del funicular, como es básicamente sobre tierra, es decir, sobre el mismo perfil del cerro, se puede adaptar más rápidamente. En cambio, una aerovía u otro medio de transporte aerosuspendido requiere que se coloquen torres, cables; es un “poquito” más complicado. Por otro lado, el ascensor, eso se opta más para pendientes mucho más pronunciadas, donde ya el funicular no tendría la potencia necesaria.
A pesar de ello, el Cabildo debería analizar bien qué tipo de funiculares colocaría, porque para el turismo se requiere que estos tengan grandes ventanales panorámicos, aire acondicionado, que soporte la lluvia e implementar personal de seguridad, indica el ingeniero Ponce.
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