Un homenaje al arquitecto que dejó una huella en Guayaquil
El también arquitecto Florencio Compte narra un libro sobre las obras de Francesco Maccaferri. Este 1 de diciembre hizo el lanzamiento de su publicación
El arquitecto y vicerrector académico de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, Florencio Compte, logró lo que tanto había anhelado: rendir un homenaje, ese homenaje que -asegura- le debe la ciudad al arquitecto italiano Francesco Maccaferri, autor de reconocidas obras que marcaron la historia del Puerto Principal.
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Leer másEste 1 de diciembre y luego de varios años, el también editorialista de EXPRESO publicó la obra ‘La producción arquitectónica de Francesco Maccaferri y su relación con los cambios en la arquitectura de Guayaquil’. Un ejemplar que, como detalló durante el lanzamiento oficial, permite entender y leer los cambios de una sociedad, y la manera de habitar y de entender el espacio.
“La idea de este libro y más que eso, una investigación, me venía rondando ya desde hace muchos años. En 2007, cuando hice un libro previo en el que cité a Maccaferri ya me llamó la atención algunos datos. Decidí investigar más y podría decir que terminé de escribir el libro poco antes de la pandemia. El proceso fue lindo, estuve en contacto con su familia, cuyos descendientes, una gran parte de ellos, viven aún en la ciudad”, indicó.
Hay arquitecturas que trascienden y dejan huella en la historia, y hay arquitectos que van más allá de las modas y cuyas obras permiten entender y leer los cambios de una sociedad y la manera de habitar. Uno de ellos, sin duda, fue el arquitecto italiano Francesco Maccaferri.
Compte, quien describió al protagonista de su narración como el iniciador de la arquitectura moderna guayaquileña, hizo hincapié en los procesos que participó y los cambios que generó. “Maccaferri fue un arquitecto que se destacó en lo clásico, en lo ecléctico y moderno. Fue realmente un arquitecto brillante, que en cada uno de sus períodos supo hacer las obras referenciales del Puerto Principal”, agregó. El Palacio Municipal, los hospitales Luis Vernaza y León Becerra, el colegio Vicente Rocafuerte, la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús..., apenas unas de las 50 grandes construcciones que hizo hasta que en 1942 se retiró.
Los datos recabados para la obra fueron financiados por la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil.
Ese año, tras el terremoto que azotó al país, una de las edificaciones que había levantado, según constaba en papeles, se destruyó. “Lo cierto es que durante el proceso de construcción, él no estuvo a cargo de la obra, había estado viviendo en Italia; pero asumió la responsabilidad porque había firmado los planos. Al final, quedó exculpado, se supo la verdad, pero decidió no seguir más en la arquitectura. Una pérdida para la ciudad... Por eso, este ejemplar es además ese homenaje que la ciudad le debe y que creo era necesario para reivindicar su nombre y el aporte que tuvo con nuestra tierra”, indicó.
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Leer másDurante el evento, Compte dio detalles de lo difícil, en algunos casos, pero siempre enriquecedor que resultó conseguir y verificar estos datos. Lo dijo con orgullo al precisar que continuará trabajando en este tipo de proyectos que logran dar a conocer la esencia del Puerto Principal.
En un reciente editorial escrito para EXPRESO, Compte hizo saber que los continuos viajes de Maccaferri a Italia y sus estancias en Milán, donde se había formado, le permitieron estar en contacto con el debate que para ese entonces se daba en esa ciudad, entre quienes defendían la continuidad de una arquitectura clásica y quienes creían en una arquitectura racionalista como expresión de la modernidad.
"La amplitud y calidad de la obra de Maccaferri, definida por su diversidad compositiva, que va desde el uso del lenguaje clásico, en proyectos como el Palacio Municipal y el Hospital General -actual Hospital Luis Vernaza-, el ‘art nouveau’ en el edificio Guzmán -actual Museo del Cacao-, hasta el lenguaje moderno, del que fue pionero en Ecuador, además de su fundamental aporte en el desarrollo de la arquitectura como actividad académica, permiten afirmar que debe ser considerado el arquitecto más destacado de Guayaquil de la primera mitad del siglo XX", detalló.