Más inmuebles de Guayaquil presentan inclinación y hundimiento como el Fantasía
Al menos tres edificios lucen inclinados y hundidos. Expertos atribuyen estas afectaciones al suelo
Hay ‘fantasías’ que causan pesadillas en Guayaquil. En la memoria de los ciudadanos quedó la demolición del edificio Fantasía, en la avenida 9 de Octubre, debido al peligro que representaba por su inclinación y hundimiento, pero hay otras edificaciones en la ciudad que presentan similares características y que generan pánico.
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Leer másEXPRESO realizó un recorrido por diferentes sectores y notó tres casos. Estos inmuebles están ubicados en la intersección de las calles Colombia y la 15 (Augusto Dillón), en el sur de la ciudad; en Carchi y Clemente Ballén, y en Pedro Carbo y Aguirre, ambos en el centro.
En el primer caso se observa una notable inclinación, lo que ha causado que arrastre consigo al inmueble vecino (observar foto 1). Actualmente, esta edificación es de cuatro plantas y se encuentra en total abandono.
Según los habitantes del sector, esta vivienda fue erigida hace 20 años y su deterioro comenzó a hacerse visible hace 15. Miembros de la familia vecina, que pidieron la reserva de su identidad, expresaron que a diario sienten temor. Incluso han llevado este caso al Municipio, pero precisan que no han tenido resultados favorables.
“Nos han pedido que presentemos una demanda o lleguemos a un acuerdo con el dueño para que lo demuela, pero los costos para ello son enormes y nos dicen que no pueden costearlo. Mientras que el Municipio dice que no puede hacer nada porque es propiedad privada, aunque esto se trate de la seguridad pública”, comenta una de ellos al equipo de EXPRESO.
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Leer másEl resto de habitantes, por su parte, indicaron que las visitas del Cabildo o del Cuerpo de Bomberos para revisar esta vivienda, han sido pocas y su atención al problema ha sido breve.
Para Vanessa Zúñiga, otra vecina, la situación es crítica, pues vive con miedo constante de que este domicilio colapse sobre ella y sus dos hijas. “Yo vivo frente a esta casa y los agentes del Municipio ya nos han dicho que en caso de que se derrumbe, nos pueden caer escombros grandes. Por eso es muy probable que deba cambiarme este año”, precisa.
Este Diario intentó contactarse con los dueños del inmueble en riesgo, pero sin respuesta.
El siguiente caso, en la calle Carchi y Clemente Ballén, se trata de una construcción de cinco pisos que, a simple vista no parece tener nada, pero presenta un desfase. Hay un ángulo de inclinación que se vuelve notorio al ver la parte superior del mismo y compararlo con el edificio vecino.
“Voy caminando por aquí, y lo primero que recuerdo es las veces que pasé frente al Fantasía, y vuelvo a recordar el temor que sentía, pensaba que en cualquier momento iba a caer y acá es lo mismo, pienso que en cualquier momento cae. Esto ya lo he reportado al Municipio, pero no toman atención”, enfatiza el guayaquileño Wilson Tenorio, quien a diario pasa por esta zona para movilizarse a su trabajo.
De igual forma, EXPRESO buscó contactarse con el dueño de la edificación para conocer qué medidas está tomando con esta situación, pero no emitieron ninguna declaración.
Las fortalezas patrimoniales de Guayaquil
Leer másEl último caso se trata del edificio Fénix, donde antes funcionaba la Fiscalía del Guayas. Este está ubicado en Pedro Carbo y Aguirre, no está inclinado, sin embargo, presenta un hundimiento notorio que, al pasar, se observa el desnivel entre la calzada y la zona de la vereda. Esta última ya se ha visto afectada por el peso.
De acuerdo con los transeúntes, el Fénix se ha hundido con el paso de los años de forma sutil, no obstante, su miedo es notorio. Este equipo periodístico pudo observar a varios ciudadanos que evitaban pasar por este punto o aceleraban el paso al caminar por aquí.
“Dicen que no pasa nada, que no caerá, pero por la forma en la que se ha hundido, es lógico creer que algo malo pueda pasar, por eso prefiero cruzar tomar el camino más largo, que pasar por aquí”, argumenta el ciudadano David Velasco.
Ante esta situación, este Diario consultó al Municipio qué medidas tomará para este tipo de construcciones, cuya situación se asemeja a la del Fantasía. Pero hasta la publicación de este reportaje, no emitieron un pronunciamiento.
Causas de los daños
En tanto, para Walter Hurtares, ingeniero y docente de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), explica que estos fenómenos ocurren, en su mayoría, debido al tipo de suelo en el que son edificados. “Esto ocurre con más frecuencia en el centro, donde el tipo de suelo que predomina es el arcilloso, donde se es más propenso a que exista hundimiento y una posible inclinación. Un problema que es más recurrente con construcciones altas”, asevera.
Por su parte, el arquitecto Ricardo Cajape concuerda que el tipo de suelo puede ser una variable, pero subraya que esto también se da por la mala planificación de una obra y demás factores. “Los hundimientos e inclinaciones de los edificios en Guayaquil se deben a una combinación de factores, incluyendo problemas estructurales, falta de estudios adecuados del terreno, vulnerabilidad sísmica y falta de mantenimiento de los mismos”, sentencia.
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