Guayaquil: El mal que se corta de raíz pero pone en riesgo la convivencia
Fueron retirados los tachos que generaban insalubridad en el lineal de Mucho Lote 1. El Municipio asegura que la acción fue socializada con moradores
Dicen que a grandes males, grandes soluciones. La insalubridad que generaban los 4 tachos de basura ornamentales, colocados al interior del parque lineal de Mucho Lote 1, en el norte de la ciudad, fueron cortados del sitio para evitar que se sigan acumulando los desechos.
Una decisión que divide la opinión de quienes circulan y visitan el área, por cuanto se cortó de raíz el problema de la mala disposición de basura, pero no se dejaron opciones para arrojar la que generan las decenas de personas que a diario acuden al sitio.
La situación fue expuesta en publicaciones realizadas por EXPRESO el 27 de diciembre de 2021 y el pasado 14 de enero de 2022, ante las quejas y el clamor ciudadano por el abandono en que se encontraba el parque, y no solo por la falta de recolección de la basura.
A decir de los moradores, tras la publicación, el personal municipal acudió al parque para pintarlo, reparar los juegos, darle mantenimiento, pero terminó cortando los botes de basura. “Yo creo que esos tachos no debieron haberlos sacado, porque la gente viene con los niños y le compran algo o alguna golosina, ¿a dónde van a botar la envoltura? Creo que ahí se va a ensuciar más todavía el área”, considera la moradora Marcia Villasagua; a quien le preocupa cómo esa decisión, que para muchos fue tomada a la ligera, pueda afectar la convivencia.
Si bien, reconoce que existía acumulación de basura al interior del parque, señala que eso era porque no entraban a recogerla. “El Municipio debió dejar los tachos y tener un poco más de control”, enfatiza Villasagua.
Con ella concuerda Antonio García, otro morador que se ejercita en el sitio y observa que ante la falta de un bote para la basura, los desperdicios están regados ahora en las jardineras. “No debieron cortarlos, tenían que hacer la limpieza, dejar los tachos con fundas para que, por lo menos, un día a la semana la recojan y poner letreros con advertencias de sanciones”, recomendó, al sostener que esa no fue la solución.
En respuesta al pedido de EXPRESO, María Fernanda Rumbea, directora municipal de Ambiente y Preservación de Áreas Verdes, dijo que socializaron con los moradores la resolución de retirar los tachos en vista de que había una mala disposición de desechos, ya que estos fueron colocados para los usuarios del parque y no para que la comunidad bote sus desperdicios comunes al interior del mismo, ocasionando problemas de apilamiento de basura común y orgánica, malos olores, además de la afectación a las especies arbóreas del lugar”.
Yo creo que esos tachos no debieron haberlos sacado, porque la gente viene a veces con los niños y les compran algo o alguna golosina (...) Hay que tener más control.
La gente mismo trae la insalubridad, entonces cómo se puede tener el parque limpio con esos botes llenos de basura, y eso que pasa el recolector cuatro veces a la semana...
Sin embargo, afirma, sin dar fechas, que estos serán reemplazados con los denominados puntos ecológicos, que son elaborados con material reciclable. "Queremos reiterar nuestro compromiso con la comunidad, es por ello que, dentro de, la planificación anual de la Dirección de Ambiente y Preservación de Áreas Verdes está contemplado el mantenimiento continuo tanto agronómico como civil en todos los parques e infraestructura verde existente en la ciudad. Las tareas agronómicas consisten en poda, desbroce, desalojo, limpieza y fumigación. Mientras que los civiles consisten en trabajos como resane en muros y bordillos, pintura general, cerramientos, soldadura y reparación de juegos infantiles o biosaludables de ser el caso", explicó la funcionaria.
Además, informó que, entre el 28 de diciembre de 2021 y enero del presente año, el área a su cargo intervino cuatro veces el parque con: desalojo de desechos y limpieza general con el apoyo de personal de Urvaseo, lo que acompañó con imágenes.
Pero para la ciudadanía que no haya una fecha precisa de la colocación de los depósitos, los deja en el limbo. “Capaz que los colocan en el 2023... Capaz que nos toca ahora meter la basura en la cartera. Ojalá y con las lluvias no se vuelva todo un regadero”, se quejaron algunos.
A Jéssica Guerrero, también del vecindario, no le pareció mala la idea, sin embargo, cree que sí se debió dejar al menos uno en el área, para quienes acuden al sitio a recrearse o llevar sus mascotas.
“Un tacho es sinónimo de responsabilidad y del buen vivir dentro de una comunidad. ¿Por qué todo lo hacen a medias?”, se cuestionan los residentes.
