Nace una fundación privada para planificar a Guayaquil
La Cámara de la Construcción lidera la iniciativa Guayaquil 20-50, que pretende convertirse en el brazo técnico del Municipio. Será multidisciplinaria
El cambio permanente de administraciones en los gobiernos locales representa un estancamiento en las agendas a largo plazo, pues cada alcalde llega con sus proyectos, algunos, en el caso de Guayaquil, no congruentes con lo establecido en el plan maestro.
Ese es el escenario que la Cámara de la Construcción pretende revertir con la creación de la Fundación Guayaquil 20-50, que busca convertirse en el brazo técnico de la autoridad local, explica Félix Chunga, miembro del directorio de la Cámara, urbanista y catedrático.
Los últimos dos años, la Cámara salió al frente con la organización de actividades que pusieron como protagonista a la planificación urbana. En julio de 2019, de hecho, se organizó un foro que tuvo como nombre ‘Las personas como eje en el diseño de las ciudades’, al que se invitó a funcionarios.
La Cámara lo que intenta es que nos miren como un aporte. No pretendemos definir, sino buscar soluciones y que la autoridad las reciba como un aporte.
Aun así, la organización no fue llamada a participar de la construcción del plan maestro que presenta la administración de Cynthia Viteri este mes, lo que causó sorpresa entre los miembros, quienes ven el lanzamiento de la fundación como una oportunidad para la urbe.
El objetivo principal de la ONG es lograr concienciar sobre la necesidad de planificación eficaz, explica Virginia Schneidewind, arquitecta, empresaria y miembro del directorio de la Cámara. “Lo siguiente es conseguir fondos necesarios para contratar a expertos internacionales para la ejecución de un estudio integral, pues para este tipo de trabajos es necesario que se incluya a personas con perfiles adecuados, que tengan la experiencia suficiente en temas de urbanismo”.
Maritza Andrade, otro miembro de la directiva, cree que lo principal en este momento en Guayaquil es empezar a ver de forma macro y dejar a un lado los proyectos aislados que no se conectan con un gran plan de ciudad. “Vemos con preocupación, por ejemplo, el que se siga pensando en construir pasos a desnivel en una ciudad que pretende mirar a largo plazo. Déjense ayudar de los expertos”, insiste.
Los municipios cambian sus mandos cada cierto tiempo y esa administración que entra cambia la agenda. Es hora de dejar de improvisar al hacer ciudad.
La fundación se plantea hacer que la planificación en Guayaquil se ejecute de manera correcta, completa, técnica y holística. “A las actividades recientes alrededor de la planificación, se suma esta intención de institucionalizar una figura para desarrollar actividades y ayudar al Municipio a tener herramientas en torno a este tema. Queremos ser el brazo técnico de la ciudad”, explica el catedrático Chunga.
“Hemos aprovechado la coyuntura para materializar la intención que tenemos. Creemos que una fundación es la figura más adecuada en temas de planificación, pues se garantizará participación de distintos actores: cámaras de la producción, academia, medios, empresa privada y público en general”, describe sobre la iniciativa.
La propuesta de la Cámara llega en medio de la coyuntura del lanzamiento del plan maestro de Guayaquil, documento que técnicos esperan analizar para presentar propuestas y señalamientos. Se supone que es la ruta de la ciudad del futuro, que tanto se exige a la administración. Viteri ha prometido presentarlo este mes.
Una de las críticas a ese documento es precisamente lo que la fundación pretende resarcir, que no se haya garantizado un diseño participativo a la hora de elaborarlo.
Algunos datos.
- Al lanzamiento de la fundación, a realizarse en los próximos días, estará invitado el director de Planificación Urbana de Gensler Latinoamérica, Carlos Cubillos. La compañía es reconocida a nivel global por trabajar en temas de resiliencia de ciudades. En 2019 hubo representantes en el foro realizado.
- Hay diferentes ejemplos a nivel mundial de planificación participativa como la planteada por la fundación. En Barcelona se analizan, diseñan y gestionan los proyectos estratégicos de escala regional, mientras en Medellín, Valle de Aburrá ejerce como autoridad ambiental y de transporte.
- Otro de los objetivos de la fundación es que se pueda despolitizar la planificación. La autoridad municipal tiene un tiempo de vigencia y piensa a corto plazo, explica Maritza Andrade. “En la fundación se garantizará que se involucren otros actores, libres de compromisos políticos”, precisa.
