Guayaquil: La Narcisa de Jesús, un polo en desarrollo afectado por el delito
La ciudadanía denuncia que la presencia policial es nula. Se han registrado 66 robos hasta el 20 de mayo
Las horas pico se han convertido en un peligro para los automovilistas en la avenida Narcisa de Jesús, uno de los polos en desarrollo del Gran Guayaquil. La ciudadanía denuncia un repunte elevado de robos en esta arteria, en cuyos costados se levantan al menos 18 urbanizaciones.
En esta ruta de poco más de 11 kilómetros y las que se levantan además un colegio y al menos cuatro plazas comerciales, los conductores circulan con miedo; pues ya no luchan solo por escapar del tráfico, también evitan ser víctimas de los delincuentes; que según alegan, se movilizan en moto o se refugian en las partes bajas de los pasos peatonales, incluso de los que se están construyendo.
Según las cifras de la Policía, entre el 1 de enero y el 15 de mayo de este año, se ha registrado en la arteria un total de 66 robos -a personas, de carros, motos-; aunque los residentes y conductores difieren de esa estadística, asegurando que es mayor, pero reconociendo que no denuncian.
Ciudadanos piden acelerar la construcción de los puentes en la Narcisa de Jesús
Leer más“A mi hijo le reventaron la llanta, un sujeto vino como loco cerca de la entrada que se conecta con Los Vergeles y con un cuchillo hizo que explote. Él salió despavorido con el carro que tambaleaba. Por suerte la situación no se complicó, pero el susto que se llevó vive con él hasta ahora. En cada semáforo se queda atento, baja el celular y arranca rápido. Tiene miedo”, comenta su madre María Cabello.
Los residentes están de acuerdo con que la razón de esta problemática se debe a la falta de vigilancia en el lugar y la oscuridad que se extiende por toda la avenida. En redes sociales incluso ha quedado el registro de cómo varios pillos hacen de las suyas, cada vez con más frecuencia. Uno de los casos registrados fue a inicios de mayo, donde un bus fue tomado por antisociales armados, ellos se encontraban cerca de Mucho Lote 2.
Pocos días después otro video mostró a dos sujetos con gafas y gorras para ocultarse, apuntando con un arma al conductor de un carro que se encontraba atascado en el tráfico, cerca de El Limonal. Pese a ello, denuncia Arturo Villacís, quien habita en Mucho Lote 2, los operativos de control no han llegado.
Juan Orellana
Es tal el temor que pocos son los que se atreven a cruzar por los pasos peatonales. “Ni de loco lo atravieso. Prefiero jugármela cruzando y rogando a los conductores para que paren, antes de desplazarme por uno de ellos. Y es que en los que están construidos a veces ves gente consumiendo drogas o durmiendo. Hay quienes se han adueñado de las estructuras. ¿Para qué entonces correr el riesgo? Hace un mes me robaron cerca de una plaza comercial, apenas bajé de un autobús. Se me llevaron el teléfono y la laptop, que son las herramientas con las que estudio. No voy a jugar a ser o no la víctima del día. Y es que a la Narcisa de Jesús, una zona que puede crecer y tenerlo todo, la vigilancia nunca llega”, piensa.
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Leer másÉrika Sandoval, quien habita en La Perla, piensa igual y lamenta que ni la Alcaldía está consciente de ello.
“La avenida tiene espacio para tener grandes edificios, parques enormes como Samanes, tiene cerros que pueden aprovecharse para recuperarlos y hacer ecoturismo. Pero si sigue así, cada día siendo escenario de más robos y violencia, quién va a, más allá de invertir, querer vivir en esta zona. En la Narcisa de Jesús incluso hay un Parque Empresarial. Me pregunto por qué teniendo en cuenta todo ese desarrollo, a esta zona no la miman más. Y es que por donde la veas está infestada de problemas. Ni árboles tiene. La ruta es el reflejo de una ciudad gris, de cemento”, sentencia.
El ciudadano José Orellana, quien por años reclamó por la construcción de nuevos puentes, ahora duda que si los dos que están construyéndose serán utilizados.
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“En los puentes que están pasando Los Vergeles y Mucho Lote, siempre ves a tipos en moto esperando a su siguiente víctima. No se mueven de ahí, pasan acechando. Una vez incluso quedé impresionado al ver cómo un tipo en pleno día le arranchó la mochila a un estudiante, por suerte se dejó robar y no le hicieron nada”, comenta.
Cynthia Pimentel
Ante esta situación, los ciudadanos exigen a la Policía que despliegue a su personal para vigilar esta zona. “Queremos que ronden por esos 11 kilómetros al menos uno o dos policías, no pedimos mucho. No pedimos nada”, argumenta Daniela Romero, otra víctima de un robo.
EXPRESO recorrió varios días, en distintos horarios, el sector y evidenció que apenas uno de los días, en horas pico al término de la tarde, rodaba un patrulla de Policía por el entorno.
Atacan con explosivo un cajero automático en la autopista Narcisa de Jesús
Leer másFrente a ello, este Diario solicitó una entrevista a la Comandancia de la Policía de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) para conocer con qué personal cuenta, cada cuánto hacen rondas y por qué nunca se los ve; pero hasta el cierre de esta edición no fue concedida.
Hasta eso, la ciudadanía se mantiene en zozobra; más aún esta semana que Guayaquil ha sido el escenario de crímenes atroces, como publicó el pasado 22 de mayo EXPRESO.
“A mí me aterra que en esta vía, tan oscura y sin vigilancia, podamos ser víctimas de un secuestro. Los raptos, como es ya público, van en aumento de una manera descomunal. No quiero salir ni a las plazas del sector que, aunque son lindas y seguras por dentro. ¿De qué me sirve eso si a lo que salgo estoy vulnerable? Ya el ocio y las salidas así sean por la tarde quedaron en pausa en la familia”, reconoce Melissa Rendón, habitante de Metrópolis.
Andrea Chalén
Alexandra Castillo, quien suele utilizar esta ruta para llegar a su residencia en la avenida León Febres Cordero, ahora se niega a recorrerla, luego de que tras dañársele el carro cerca de la entrada de Mucho Lote 2, dos motorizados, uno de ellos armados, la acechara.
“No les vi la cara porque tenían mascarillas, pero sabía sus intenciones. Tu no das vueltas en círculos por gusto en las veredas y te quedas viendo un carro. Yo me di cuenta de que querían robarme. Por suerte en ese momento llegó la grúa y eso los ahuyentó. No sé qué hubiese sido de mí si no llegaba en ese momento la grúa”, relata.
Irene Mancilla, residente de La Perla, exige vigilancia en las zonas donde es habitual el congestionamiento: el ingreso al puente que conduce a Daule, la entrada principal a Metrópolis 2, la zona de El Limonal y Sauces 4, donde se han reportado la mayor cantidad de atracos.
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